Otro informe agrega que, de acuerdo a lo que dice el propio Ministerio de Economía, la deuda pública (interna y externa) a junio de 2014 era de 198.900 millones de dólares, más 11.900 millones de dólares de la deuda no ingresada al canje (IECO, 29/03).
La deuda interna ha crecido porque el gobierno usa dinero del Banco Central y del Anses, a cambio de papeles que generan nueva deuda que tendrán que pagar las futuras generaciones. El especialista Héctor Giuliano señala que “el gobierno de Kirchner le ha traspasado al propio estado –y consecuentemente, al pueblo argentino-, la pérdida de una deuda impagable” (ídem). Está claro, la deuda se agranda. Hay que suspender los pagos de la deuda externa para solucionar los graves problemas sociales.