Estamos impulsando la campaña del Frente de Izquierda con propuestas reales para los trabajadores y vecinos, recorriendo colegios, facultades, oficinas, fábricas, líneas de subte, las villas de la Ciudad, los parques, siempre con un mensaje clarísimo: estamos contra el PRO en todas sus variantes -Larreta y Michetti son dos caras de la misma moneda-, contra la privatización y la decadencia en la salud y la educación pública, contra la Ciudad de la especulación inmobiliaria que genera el déficit habitacional más grande de la historia. En síntesis, contra la Ciudad para los ricos, los meganegocios y el turismo.
Pero a la vez advertimos: ¡cuidado compañero lector si está buscando una “opción” para oponerse al macrismo! Porque tanto el kirchnerismo en todas sus variantes, como Lousteau y el ECO, posan de opositores en la campaña, pero son una gigantesca estafa. Como hicieron todos estos años, terminarán votando juntos todas las leyes antipopulares en la legislatura porteña.
El kirchnerismo, que protesta demagógicamente contra la destrucción de la educación y la salud pública, ¿en qué estado tiene sus escuelas y hospitales ahí nomás, cruzando la General Paz? La máxima expresión de las complicidades entre macristas y kirchneristas está en el negocio del juego: ambos eximen de impuestos y apañan a Cristóbal López. Y el ECO es la expresión local del acuerdo entre los radicales y la Coalición Cívica de Carrió que ya acordaron ir con Macri en las presidenciales: ¡son una simple colectora del PRO!
El Frente de Izquierda es la única garantía de los que vamos a seguir dándole pelea al macrismo en la Ciudad, y a todos los candidatos de los partidos patronales a nivel nacional, se llame Scioli, Macri o Massa. Un voto al Frente de Izquierda será para estar más fuertes para pelear por un salario igual a la canasta familiar, para defender la salud y la educación públicas, por un plan de viviendas populares y, en definitiva, por todas y cada una de las peleas que se vendrán contra el mayor ajuste que preparan.
No será una pelea fácil. Habrá 31 listas en el cuarto oscuro. A las del PRO, el kirchnerismo y Eco, hay que sumar los restos del fracaso de la centroizquierda (como Lozano) o de los que, ausentes de cualquier lucha, “aparecen” cada cuatro años buscando medrar con la imagen (como Zamora), además de una extensa cantidad de boletas de ignotos personajes. No será sencillo el simple hecho de “encontrar” al Frente de Izquierda en el cuarto oscuro. Y el macrismo “se copió” de la cláusula proscriptiva del kirchnerismo a nivel nacional: aquella lista que no alcance el 1,5% de los votos, no pasará a la elección definitiva.
El Frente de Izquierda tiene todas las condiciones para salir airoso de este desafío. Es la expresión de la unidad de la izquierda, sus candidatos son luchadores reconocidos, tiene una gran militancia en la Ciudad, viene de obtener 1.200.000 votos en la última elección nacional y ha realizado excelentes performances en las elecciones recientes en Salta y Mendoza.
Para lograrlo, compañero lector, necesitamos su voto. Que nos ayude a que muchos más nos apoyen ese día, peleando entre familiares, amigos, compañeros de trabajo y estudio. Y dándonos una mano para fiscalizar el domingo 26. Así, entre todos, también en la Ciudad de Buenos Aires, haremos más grande al Frente de Izquierda.