En la primera semana de abril la planta Pepsico de Florida, zona norte bonaerense, realizó un fuerte paro de 24 horas. El motivo fue el hartazgo de las compañeras ante la discriminación laboral de la patronal, avalada por la burocracia Verde de Daer del sindicato de la Alimentación. Las mujeres, en vez de la categoría de oficial, tienen la de medio oficial, una categoría que no existe en el conjunto del gremio. Además, las compañeras trabajan con mayores ritmos e intensidad y con múltiples tareas no reconocidas, sufren enfermedades laborales como tendinitis, hernia de disco y otras.
Hartas de que la empresa no reconozca esta situación, las compañeras comenzaron una lucha enorme, apoyadas por la comisión interna dirigida por la Bordó. Este miércoles se dictó una conciliación obligatoria y ahora se está debatiendo cómo seguir. Desde Izquierda Socialista damos todo el apoyo a esta lucha.