El gobierno de misiones (radical K) decretó la emergencia sanitaria luego de haber ocultado la gravedad del brote. Minimizaban la cantidad de casos cuando todos los habitantes de Posadas tienen un vecino, amigo o pariente enfermo. No aplicaron medidas de prevención como limpieza de baldíos, colocación de mosquiteros o campañas de educación sanitaria.
Las campañas de prevención son escasas y los precios de los repelentes aumentaron una barbaridad. El ministro de Salud de Macri, Jorge Lemus, se fue a Suiza justo en el peor momento y mientras su viceministro estaba de vacaciones en Punta del Este. Al regresar la única medida que tomó fue acordar un precio con los fabricantes de repelente ($35 el envase de 165 cc). “Le pedimos a la gente que se comprometa”, declaró sin ponerse colorado.
También hay alerta por otros dos virus, el zika y el chikungunya. Ya hay un caso confirmado de zika en el país, un virus que se conoce desde 1947 y se cree que provoca microcefalia en bebés nacidos de madres infectadas.
Al no existir vacunas ni test de detección rápida que permitan aislar a los pacientes y así cortar la cadena de contagio, el único método para contener el brote es combatir al mosquito transmisor Aedes Aegypti. En Misiones ya hubo una marcha reclamando medidas. ¡Exigimos inmediatas campañas de prevención, fumigación y limpieza de terrenos baldíos y espacios verdes por parte del gobierno nacional y provinciales!¡Que se construyan mosquiteros para las casas! ¡Que los laboratorios pongan gratis los repelentes para las familias! ¡Que los recursos que se destinen sean controlados por las organizaciones sociales y barriales!