Luego de lograr frenar un desalojo en 2015 e impedir la aplicación de la ley antiterrorista, la justicia desalojó la semana pasada a los mapuches y encarceló a la mayoría, incluido Facundo Jones Huala, con pedido de captura desde Chile. La movilización logró que en menos de 48 horas liberaran a todos menos a Jones Huala. Y el juez tuvo que aceptar que declararan como domicilio al territorio recuperado.
La liberación de los detenidos se vivió con gran alegría, aunque Huala sigue detenido en la cárcel de Esquel por 60 días.
La persecución y destierro de los pueblos originarios, en particular el mapuche, viene desde hace años con la construcción del estado argentino y la “conquista del desierto”. Hoy continúa esta política de restringir al pueblo mapuche a la periferia de las ciudades o pueblos del interior, sin acceso a la tierra más que como puesteros de los grandes terratenientes. El pueblo mapuche quiere recuperar su identidad arrebatada, con su idioma, sus vestimentas, sus tradiciones y sus territorios.
Félix Díaz y Relmu Ñamku vinieron a Esquel a brindar su apoyo, al igual que muchos luchadores. Desde Izquierda Socialista seguimos apoyando y levantando la consigna de “libertad para Facundo Jones Huala” y “no a la extradición”.