Nadie, salvo los corruptos, puede estar en contra de acabar con la corrupción. Por eso sus denuncias caen bien en un importante sector de la sociedad. Ahora detengámonos en ver a dónde lleva la política de Stolbizer. El martes 30 de agosto tuvo una reunión privada con el presidente Macri, y el mes anterior había desayunado con la gobernadora Vidal. El miércoles 31 de agosto estuvo presente en la cumbre del Frente Renovador en Parque Norte, junto a Sergio Massa y José Manuel de la Sota, dando fuertes señales de un futuro acuerdo electoral en 2017. Allí manifestó: “Estoy en el lugar que tengo que estar”, palabras que produjeron la ovación de la dirigencia massista. ¡Reivindica estar junto a dirigentes del PJ! No olvidemos que Massa fue jefe de gabinete del gobierno kirchnerista y De la Sota ex gobernador menemista de Córdoba. Por su parte, Victoria Donda, diputada y dirigente de Libres del Sur, también fue a esa cumbre y ve positiva una alianza electoral con el Frente Renovador.
El 1 de setiembre Stolbizer presentó su libro Yo acuso, un repaso de sus denuncias contra la expresidenta Cristina Kirchner. Se encontraban en el Palacio San Miguel la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, quién no tuvo más que elogios para con la autora; el propio Sergio Massa; el gobernador de Jujuy, el radical Gerardo Morales, responsable de la represión a los trabajadores del ingenio Ledesma (de la familia Blaquier); Miguel Lifschitz, gobernador de Santa Fe; el intendente de Vicente Lopez, Jorge Macri (primo de Mauricio Macri); Ricardo Alfonsín, diputado radical, y Victoria Donda. Como se puede apreciar, una presencia plural de distintos partidos patronales que le genera “felicidad y esperanza”, según sus propias palabras.
Si es que alguna vez lo fue, a Stolbizer no le queda nada de progresista. Centra su política sólo en denunciar la corrupción kirchnerista y apoya las políticas de ajuste y entrega del gobierno de Macri-Cambiemos desde una “oposición responsable”.
Por todo lo dicho, compañero lector, lo llamamos a que no deposite ninguna confianza en ella. Sus propuestas no resolverán ninguno de los problemas que padece el pueblo trabajador. Es la política que siempre llevó adelante la centroizquierda, no plantea soluciones que cambien la estructura capitalista dependiente de la Argentina, origen de todos los males que padecemos, sólo propone continuar con la misma pero “sin corrupción”.
Siempre dijimos que la centroizquierda apoya a los gobiernos de turno, sean peronistas, radicales o como ahora al de Macri. La única salida de fondo viene por izquierda.