Ante las reacciones periodísticos a su llamado, se inició una campaña internacional de firmas de “solidaridad con Borón”, argumentando que fue “difamado”.
No sabemos en qué consistiría la “difamación”. Pero teniendo en cuenta que no hay una rebelión armada en Venezuela, la única interpretación posible del llamado de Borón es que apoya una represión para “aplastar” lo que él llama “contrarrevolución”, que son las manifestaciones populares contra el gobierno, que desde hace semanas han desbordado totalmente las actividades convocadas por la MUD (oposición de partidos de derecha) y abarca a los barrios populares históricamente chavistas. Es decir, Borón llama sin vueltas a establecer una abierta dictadura militar antipopular. Ni siquiera intenta excluir de la represión, que recomienda, a los barrios populares o a la oposición de izquierda y el chavismo crítico. Esto no es “difamación” sino simplemente leer lo que él escribió.
El llamado de Borón repite además la mentira de la “guerra económica” imperialista. Un absurdo teniendo en cuenta que Estados Unidos es el principal comprador del petróleo de Venezuela y que Maduro se jacta de que pagó en dos años 60.000 millones de dólares de deuda externa a los mismos supuestos autores de la “guerra económica”. Borón no propone tampoco ningún cambio en esta política económica proimperialista de Maduro.
Repudiamos este indignante llamado de Atilio Borón a aumentar la represión militar en Venezuela. Somos solidarios con la rebelión popular, contra el hambre y la represión, para echar al gobierno dictatorial de Maduro, en forma totalmente independiente de la oposición patronal de la MUD.