En los barrios de Almagro y Boedo el 7,21% de los vecinos nos apoyó con su voto. Otro tanto ocurrió en barrios como Chacarita, Paternal o Villa Crespo, entre otros, donde obtuvimos el mismo porcentaje. Se alcanzaron picos cercanos en Balvanera y San Cristóbal. Fue el reconocimiento por parte de un importante sector de vecinos y trabajadores que nos ven como la única oposición consecuente al ajuste de Macri y Larreta, que comprendieron que el único voto útil para defender sus intereses es por el FIT.
Lamentablemente el rol divisionista jugado por el proyecto personalista de Zamora (Autodeterminación y Libertad), impidió que Marcelo Ramal entrara como diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires. La izquierda de conjunto hubiera superado el 10% de los votos.
Como sucedió en la mayoría del país, Cambiemos se impuso con amplitud en la Ciudad, y en esta, Tombolini, el candidato de Massa, replicó su estrepitoso fracaso.
Myriam Bregman y Gabriel Solano serán los primeros que asumirán sus cargos en la Legislatura porteña. Esos cargos serán rotativos, producto del acuerdo alcanzado entre las fuerzas que conformamos el FIT. De esta rotación Izquierda Socialista participará con Nicolás Núñez (miembro de la comisión directiva de la FUA) y Pablo Almeida (delegado general de ATE-Mecon). Pasadas las elecciones, los legisladores de Unidad Porteña, Evolución Ciudadana y 1País (Filmus, Lousteau y Massa respectivamente) volverán a lo de siempre: negociar y votar las leyes junto con Cambiemos. Nuevamente serán los legisladores del FIT los que desde sus bancas y en las calles apoyarán las luchas que los trabajadores y vecinos darán contra el ajuste. Este sigue siendo nuestro compromiso.