Esta instancia de coordinación regional, de la que participaron estatales, docentes y otros sectores, fue llamada por delegados del Astillero Río Santiago, que reclaman la reconstrucción de la industria naval, y el Supeh de Ensenada (petroleros), que vienen sufriendo las políticas de ajuste con despidos. La movilización del 23 es un paso importante en el reclamo de que la CGT y las CTAs abandonen la tregua y desarrollen un plan de lucha nacional para derrotar el ajuste de Macri y sus cómplices.