Desde el 14 de enero un grupo de trabajadores de la empresa Clorox (Ayudín), ubicada en Aldo Bonzi, La Matanza, se encuentran en conflicto debido a que la patronal multinacional desde hace más de un año viene profundizando medidas de flexibilización, intentando cambiar las condiciones de trabajo. La bronca estalló cuando la patronal se negó a reconocer el certificado médico de un compañero que luego fue maltratado por la seguridad de la empresa provocándole un preinfarto en puerta de fábrica. Desde entonces y por varios días, un grupo de trabajadores impulsó un piquete impidiendo el ingreso y egreso de cargas a la planta.
Actualmente el Ministerio de Trabajo ha dictado la conciliación obligatoria. La empresa no reconoce esta medida y cínicamente argumenta que los activistas que encabezan el piquete “alteran” la paz social en la empresa. Los trabajadores le han concedido una última semana de plazo al ministerio. Desde Izquierda Socialista hemos acercado nuestra solidaridad y nos hemos puesto a su disposición para apoyar incondicionalmente su lucha contra la patronal de Clorox.
Corresponsal