Escribe Ezequiel Peressini Legislador de Izquierda Socialista/FIT
El pasado miércoles 15 los trabajadores de Luz y Fuerza realizaron una masiva movilización contra la privatización de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC). Más de 20.000 personas se congregaron junto a distintas organizaciones gremiales, estudiantiles y sociales. Rubén “Pollo” Sobrero llevó la solidaridad del sindicalismo combativo.
El 6 de abril el gobierno de Schiaretti hizo público que modificaría el marco regulatorio de la energía eléctrica provincial para permitir la participación de empresas privadas y aprobó en la Legislatura cordobesa tres proyectos de ley con los que recortaron las conquistas históricas del convenio colectivo de trabajo, declarando la guerra a los trabajadores de Luz y Fuerza.
Han pasado casi cinco meses de conflicto y el gobierno apresura el vaciamiento de EPEC para preparar la privatización. El PJ cordobés lo viene intentando de manera sistemática desde el año 2000, cuando el ex gobernador José Manuel De la Sota aprobó la Ley de Modernización del Estado con la que se buscaba la privatización de todas las empresas provinciales. No pudieron lograrlo por la resistencia popular, aunque realizaron maniobras fraudulentas para endeudarla y vaciarla. Se realizaron obras corruptas con empresarios, como de Electroingeniería en la Central Pilar, que originalmente fue licitada por 211 millones de dólares pero finalmente se terminaron pagando más de 1.000 millones, ¡800% mas! También fraguaron los balances para esconder el robo y vaciamiento de áreas operativas. La anulación de las horas extras paraliza la empresa, destruye los equipos de trabajo y permite el avance en la tercerización de servicios.
Con el nuevo marco regulatorio que pronto buscará aprobar en la Legislatura, el gobierno quiere entregar a EPEC al negocio de los grandes grupos empresarios a través de concesiones, la creación de nuevos actores en el sistema energético y la división de la empresa estatal e integrada. A esto se le suma la liquidación de las conquistas obreras con el objetivo de reducir el “costo laboral” para garantizar la rentabilidad del sector empresarial que se hará cargo de la electricidad en nuestra provincia profundizando el aumento en las tarifas eléctricas.
El gremio de Luz y Fuerza tiene una gran tradición de lucha. A pesar de esto las internas del PJ y la CGT (dirigida por el legislador de UPC-PJ José Pihén) paralizan al movimiento obrero alejándolo de las heroicas experiencias de lucha como el Cordobazo o las más recientes acciones que paralizaron las privatizaciones de la EPEC en la década del 90 y el año 2000. Es por eso que para lograr la última gran movilización que golpeó al gobierno fueron fundamentales las asambleas en los lugares de trabajo, con delegados que representan a la base para así imponer la necesidad de unir al movimiento obrero en la lucha contra las privatizaciones y el ajuste. Los nuevos referentes gremiales y los jóvenes activistas vienen cumpliendo ese importante rol que combina la experiencia histórica de un sindicato con trayectoria y la juventud que lucha, permitiendo sacarlo de la parálisis promovida por las burocracias sindicales.
Desde Izquierda Socialista venimos acompañando esta pelea exigiendo un paro provincial para enfrentar a Schiaretti y su ajuste, contra la privatización y desguace de la EPEC y contra el aumento de tarifas. Arranquémosle a la CGT y las CTA un paro y plan de lucha para derrotar definitivamente el ajuste de Macri, los gobernadores y el FMI. Por todo esto seguiremos hasta el triunfo, porque la defensa de la EPEC estatal e integrada, es tarea de todo el pueblo de Córdoba.