Escribe Nicolás Núñez, legislador porteño de Izquierda Socialista/FIT Unidad
No nos cabe ninguna duda de la importancia de cumplir con la cuarentena ante la pandemia del coronavirus. Para garantizarla, el gobierno desplegó enormes operativos con las diversas fuerzas de seguridad. Mientras que en los barrios de clase media y alta en general, se limitaron a verificar los permisos para transitar, en barrios y asentamientos populares se vienen registrando preocupantes situaciones de abuso de las distintas fuerzas de seguridad.
Hasta el domingo 29 de marzo 524.557 personas fueron interceptadas por las fuerzas de seguridad y notificadas del curso de una causa legal, y 13.006 fueron detenidas sin que se produzca aún su liberación. En el marco de esos operativos se viralizaron videos de efectivos forzando a personas demoradas a hacer flexiones o repetir frases como en los tiempos del servicio militar y de trabajadores de empresas de delivery siendo detenidos por la policía en la ciudad de Buenos Aires y en Rosario. Desde ya que estos ejercicios de violencia y abusos se desarrollan en los barrios humildes y contra trabajadores. En contraposición, un directivo de la fraudulenta empresa Vicentin fue demorado en reiteradas ocasiones violando la cuarentena sin que nadie le ponga un dedo encima. Las fuerzas represivas actúan siempre con claras indicativas de clase.
Estos hechos pusieron en alerta a organismos de derechos humanos y al Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVJ) que emitió un comunicado denunciando los abusos policiales. El gobierno afirma que los efectivos filmados fueron sancionados, pero nada de eso se conoce oficialmente, y los hechos siguen sucediendo diariamente. Esto aumenta la preocupación ante la extensión de la cuarentena, y ni qué hablar si el gobierno no dispone medidas concretas para paliar la grave crisis económica y social que está creciendo en zonas como el conurbano bonaerense.
La declaración del EMVJ, que suscribimos desde Izquierda Socialista, finaliza señalando: “Las fuerzas de ‘seguridad’ que siguen impunes de todos los crímenes cometidos hasta la fecha, la policía del gatillo fácil, la gendarmería del gendarme carancho y de la desaparición en democracia no son quienes van a concientizar sobre la necesidad de la solidaridad y el cuidado mutuo”. El pueblo trabajador va a saber mantener la guardia alta frente a la pandemia y también frente a los abusos de las fuerzas de seguridad.