Escribe Juan Carlos Giordano, Diputado nacional electo Izquierda Socialista/FIT
Fue noticia. Cristina Fernández se recluyó en El Calafate. Le dio la espalda a la marcha contra el G20. Se borró. Esto no sería novedad, ya que Cristina nunca va a una movilización. Pasa que la orden de no participar fue esta vez también para los referentes K. Llamó específicamente a no concurrir. Por eso no se los vio a Kicillof, a Rossi, ni a ningún otro conocido. La “jefa”, acostumbrada a largas cadenas nacionales, tampoco tuiteó sobre el tema.
Cristina Kirchner, quien pidió el voto “contra el ajuste” y ataca permanentemente a la derecha, no abrió la boca para criticar a “toda la derecha” mundial que se reunió en Argentina. Tampoco dijo nada sobre la “derecha de Macri” que los recibió. Es decir, el Frente para la Victoria (hoy Unidad Ciudadana) despotrica contra el ajuste, el FMI y la derecha, pero cuando hay que jugársela contra estos gobiernos capitalistas e imperialistas saqueadores se borra. Fruto de esto es que la propia Cristina, previo al G20, dio una charla en la “contracumbre” con Dilma aclarando que “no era contra nadie”. Es decir, ni contra Macri, ni contra Trump ni ninguno de los ajustadores que vinieron al país por más ajuste y saqueo.
Esto ha desconcertado a miles de honestos luchadores y jóvenes que creen que Cristina es la salida contra el ajuste y el capitalismo global. A tal punto que algunas agrupaciones que levantan “Cristina 2019” fueron a la marcha, contradiciendo su silencio cómplice y desmovilizador. Esto se une, por ejemplo, a lo que vino manifestando Scioli (el candidato de Cristina que perdió ante Macri), de que Trump “defiende el trabajo y la industria nacional” (Perfil, enero 2017). O a las recientes declaraciones de su ex ministro de Economía Kicillof (ver página 3).
La actitud de Cristina confirma lo que venimos diciendo desde nuestro partido. Cristina, Kicillof y La Cámpora, hicieron “buena letra” ante el G20 porque ya han dicho que no van a romper el acuerdo Macri-FMI y van a seguir pagando la deuda externa. Es más, semanas atrás, Cristina sorprendió con su llamado a la “unidad del peronismo” a lo que ella misma considera la derecha de su partido, es decir, con Pichetto, Urtubey y los gobernadores.
Si el kirchnerismo no enfrenta (¡ni denuncia!) al imperialismo ¿de qué “independencia económica”, “soberanía política” o “combate a las corporaciones” habla? Solo critica a Macri mirando las elecciones del próximo año . El Frente de Izquierda, en cambio, estuvo en primera fila el viernes 30 contra el G20, repudió a Trump y al resto de los líderes capitalistas y explotadores, llamó a romper el pacto con el FMI y está por el no pago de la deuda.