Escribe Nicolás Núñez, legislador porteño electo por Izquierda Socialista/FIT Unidad
Con acciones en cada provincia, la convocatoria con el lema #BastadeFalsasSoluciones ganó las calles multiplicando los reclamos que van de lleno contra un elemento central de la política del gobierno, la depredación ambiental al servicio del pago de la deuda.
El detonante de la convocatoria que se empezó a gestar hace algunas semanas fue claramente el acuerdo por la importación de las megafábricas de cerdos que quieren cerrar el canciller Felipé Solá, el ministro de Economía Martín Guzmán y el presidente Alberto Fernández con la dictadura capitalista de China. Pero lo cierto es que la propia realidad del país fue agregando otros temas de peso en la convocatoria. Las quemas de los humedales que no dan tregua, los incendios en Córdoba que se dispararon en estos días, los cada vez más terroríficos datos del volumen del desmonte en el Norte del país también son parte del mismo panorama.
¿Qué une todos estos fenómenos? El hecho de que el propio Fernández, y de esto ha quedado incluso registro fílmico, le puso como garantía de pago a los bonistas el avance en el saqueo de los recursos y bienes naturales de nuestro país.
Un gran paso adelante en la coordinación de la lucha ambiental
Es contra esta realidad que se plantó una respuesta de fisonomía nacional y por primera vez se avanzó en crear instancias de coordinación entre una enorme cantidad de organizaciones ambientales contra la explotación animal y las organizaciones del Frente de Izquierda Unidad, donde se pusieron por delante puntos en común por los cuales llamar a movilizar. Así se logró cubrir el país entero con actos que tuvieron distintas formas de acuerdo a la situación sanitaria y represiva de cada provincia. Desde Izquierda Socialista nos sumamos y fuimos parte de la preparación de la jornada codo a codo con el conjunto de las agrupaciones.
Así, por ejemplo, en el Sur del país estuvimos presentes en el Centro Cívico de Bariloche, movilizados sumando a la convocatoria los reclamos contra la megaminería, el proyecto Amarillo Grande, de extracción de uranio en la provincia de Río Negro, y la restitución de la ley 3.981 anticianuro. También en Río Gallegos nuestra juventud hizo una enorme pintada en apoyo a la jornada. En Neuquén nos movilizamos incorporando el reclamo por el rechazo a la represa sobre el río Nahueve, en una convocatoria que contó con las adhesiones de la asamblea por el agua del norte neuquino y la mesa campesina del norte neuquino.
En la Ciudad de Buenos Aires se dio una gran convocatoria a la Plaza de Mayo, que además de los reclamos de la jornada tuvo la tarea de evitar que la policía de Larreta se lleve detenidos a dos compañeros, para lo cual se realizó una gran sentada delante de la infantería y el patrullero evitando el traslado y logrando su liberación. Fue un gran ejemplo de unidad de acción en las calles que tenemos que seguir forjando. En La Plata se realizó una concentración con el acompañamiento muy importante de las adhesiones de la Asamblea de Vecinos Contaminados de Berisso, Ensenada y La Plata, Asamblea Salvemos al Monte, la Asamblea Vecinal Barrio Norte, Espacio de Inundados y la Asamblea de Inundados de Tolosa.
En Rosario, donde venimos siendo parte de las movilizaciones de la Multisectorial por los Humedales, el lunes se cortó el puente Rosario-Victoria, y el 25 se movilizó confluyendo con el 25A. Al enterarse de la situación en la Plaza de Mayo, se resolvió sostener la convocatoria para también hacer fuerza contra las detenciones. En Córdoba se hizo una vigilia de doce horas delante del Ministerio de Agricultura y Ganadería, donde a los reclamos nacionales se le sumaron los de los incendios en las sierras. En Santiago del Estero realizamos junto a los compañeros de XR (Rebelión o Extinción) intervenciones en la avenida principal.
En las provincias donde se volvió a Fase 1 y la situación represiva no lo permitió, se siguió la jornada activamente por las redes. Así como también se dieron importantes adhesiones a la jornada nacional, como la de la CTA de Bahía Blanca junto a diversos espacios ambientales, la Cátedra de Educación y Derechos Humanos de la Universidad Nacional del Sur y centros de estudiantes.
La lucha sigue
La jornada del 25A logró dar visibilidad a un conjunto de reclamos urgentes contra la política del gobierno y dejó sentado un camino por el cual seguir organizándose. Desde Izquierda Socialista creemos que tenemos ahora que darle continuidad a la coordinación en cada provincia por cada una de las reivindicaciones concretas y comenzar a preparar el 25 de septiembre otra jornada nacional en el marco de una nueva Huelga Mundial por el Clima. ¡Manos a la obra!