Escribe Martín Fú
El poderoso equipo inglés, al mando del catalán Pep Guardiola, acaba de ganar el torneo local, la Premier League. En Manchester, el mismo día en que se despidió Sergio “Kun” Agüero, los festejos tomaron un color especial. El jugador argelino Riyad Mahrez eligió envolverse la bandera de su país y hacer flamear por todo el campo de juego la enseña de Palestina ante la mirada de quienes pudieron verlo desde las tribunas y los millones de espectadores que desde su casa vibraron en la final frente al Everton. Otra muestra más de apoyo y solidaridad al pueblo palestino, esta vez desde el mundo del deporte y uno de sus protagonistas.