Escribe José Castillo
Tanto la directora general del FMI, Kristalina Georgieva como la número dos del organismo, Gita Gopinath, manifestaron “comprensión” ante el anuncio del proyecto de nuevo impuesto a la renta inesperada.
Es que el objetivo del Fondo es que los países deudores recauden lo más posible para, justamente, cumplir con la reducción de los déficits fiscales y así poder pagarle en el futuro la deuda al organismo.
Por supuesto que lo central para el FMI es la reducción del gasto (ahí está el corazón del ajuste). Pero aceptan que esto se pueda complementar con nuevos impuestos.
Por eso, aún antes del anuncio de Alberto Fernández y Martín Guzmán, ya el propio FMI lo había anticipado en su informe titulado “La deuda del sector privado y la recuperación mundial” y que se conoció al inicio de las recientes reuniones de primavera (boreal) del FMI y el Banco Mundial. Todo al servicio de seguir cobrando la deuda externa. Como vemos, no se trató de una ocurrencia del presidente ni de su ministro de Economía, sino una “sugerencia” del propio Fondo.