Escribe Claudio Funes

La figura de Milei está en declive. Sus declaraciones cosechan gran repudio. Esto se reflejó en el acto del club El Porvenir. Tras su fracasado lanzamiento se hacen públicas las internas en La Libertad Avanza, mientras, Milei continúa intentando aglutinar a la derecha más reaccionaria.

Milei anunciaba que iba a llenar el estadio del club El Porvenir para el lanzamiento de su candidatura presidencial en la provincia de Buenos Aires; pero el viernes 10 de junio las tribunas, con capacidad para 14.000 personas, lucían semivacías. La estrella del “anarco-capitalista” comenzó a declinar.

Milei emergió como un fenómeno con su discurso contra la casta política y la corrupción. Pero es necesario decir que para ello contó con la inestimable ayuda de los medios de comunicación, en especial de la televisión, que hicieron que en su pico de imagen positiva se hablara de él como el tercer actor en la disputa presidencial de 2023.  Las últimas encuestas muestran que su caída llega a los diez puntos sobre su imagen positiva.

Existen varias razones para explicar este declive. Nosotros tomaremos las declaraciones del “libertario” debido a que éstas lo muestran como un representante del neofascismo, que intenta llevar la lógica del capitalismo a su extremo. Esto es, una guerra absoluta contra el pueblo trabajador y los sectores populares.

En las últimas semanas el “chico malo” realizó declaraciones que nada tienen que ver con los problemas más urgentes a resolver para los trabajadores, como son los bajos salarios, la desbordante inflación, el incremento de tarifas y la miseria creciente.

La más estridente, por su contenido aberrante, de desprecio hacia el pueblo pobre, fue su cuestionamiento a la donación de órganos. Defendió la idea de su libre comercialización con el argumento de que cada uno es dueño de su cuerpo y puede hacer con él lo que crea conveniente. Y enfatizó “Es un mercado más”.  De esta manera el que se opone al derecho al aborto favorece a las mafias del tráfico de órganos.

El cinismo de Milei no tiene techo. El obrero que vende su fuerza de trabajo como una mercancía a cambio de un pobrísimo salario, si se ve forzado por la miseria, podría vender también un órgano. Las distintas partes del cuerpo humano pasan a ser una mercancía más. La sociedad que propone Milei se divide en dos: los que tienen dinero para comprar órganos y los pobres que solo podrán venderlos hasta el límite de su propia vida. El “anarcocapitalista” fue más allá, afirmó que si fuera presidente derogaría la ley de donación de órganos.

También se pronunció por la libre portación de armas de fuego. Eligió el momento justo. Lo dijo luego de la masacre de Ubalde, Texas, donde fueron asesinados estudiantes y maestros con un saldo de al menos 21 muertos. Si se puede portar un arma, se la puede disparar. Otra propuesta que va contra el pueblo pobre.

Por si todo esto fuera poco, justo cuando se  cumplen cuarenta años de la gesta de Malvinas, Milei declaró que entre sus principales referentes se encuentra nada más y nada menos que Margaret Thatcher.

Entre otras declaraciones, estas fueron duramente repudiadas por amplios sectores de la sociedad. Aquí está en gran parte la explicación del fracaso de su acto en Gerli, que junto con su acercamiento a Macri dispararon la interna en el frente libertario.

Carlos Maslatón, autodenominado “puntero marginal” de Javier Milei, cuestionó de manera pública la organización del acto, que estuvo a cargo de la hermana del economista, Karina, y del ex asesor de Domingo Cavallo, Carlos Kikuchi. “Están operando en contra y para sabotear la campaña de Javier Milei. Todos los militantes históricos de la Libertad Avanza y de la derecha liberal argentina quedamos espantados”.

El otro foco que recalienta la interna libertaria es el acercamiento con Macri, al que califican de temprano. La Libertada Avanza tiene una estructura muy débil y los que pelean por candidaturas ven tambalear sus intereses ante la posible unidad con el ex presidente.

Pero la cosa no termina aquí. El próximo jueves 23 Milei realizará en la provincia de Tucumán un acto con Ricardo Bussi, hijo del genocida Antonio Domingo Bussi. Busca sellar su alianza con este fascista, viejo integrante de lo que él llama “la casta política”, rumbo a las elecciones de 2023.

Milei trata de juntar a los sectores más reaccionarios para lograr pelear por la presidencia y aplicar medidas que serán un tremendo ajuste contra el pueblo trabajador y los sectores populares para beneficiar a las multinacionales y al gran capital.