Escribe Mercedes de Mendieta, legisladora CABA Izquierda Socialista/FIT Unidad
El gobierno de Fernández atraviesa una fuerte debacle y quien aparece en las encuestas para disputar la presidencia es Juntos por el Cambio, a pesar de sus crisis y disputas internas. Está claro que es necesario un recambio al peronismo, pero no son salida Larreta, Bullrich, Macri o Gerardo Morales. Dicen que si ganan las elecciones habrá un ajuste de shock porque el “gradualismo” del gobierno de Macri no sirvió para la “transformación” que necesita el país.
La semana pasada, Macri presentó su libro en Mar del Plata ¿Para qué?, sin dejar claro si se va a presentar o no. El ex presidente dijo que el gobierno de Fernández “es el peor de todos los tiempos” y habló de la necesidad de un “cambio claro, profundo y veloz”. En otras palabras, que un posible gobierno de Juntos irá por las reformas estructurales que no hizo en sus desastrosos 4 años anteriores.
Recordemos. Entre 2015 y 2019 las tarifas de luz y gas en el AMBA ascendieron entre el 1.500% y el 5.500%. Terminó su mandato con una inflación acumulada del 296%. La “pesada herencia” de Macri dejó al país con una deuda inédita por 45 mil millones de dólares con el FMI, que fue a parar a la timba financiera y a la fuga de capitales.
Entre los hechos más repudiables se destaca la represión que vivimos trabajadores y trabajadoras en 2017 mientras votaban junto al peronismo la reforma previsional a la baja.
A Larreta lo conocemos bien porque lleva casi 8 años de gobierno en CABA, la ciudad más rica y desigual del país. Larreta gobierna bajo un modelo de negociado inmobiliario expulsivo, donde se construyen edificios de lujo, y crecen la población de los barrios populares y las viviendas ociosas. Un gobierno que tuvo como centro de ataque a la docencia y estudiantes de la educación pública. Su repudiable ministra de Educación, Soledad Acuña, será una de las candidatas a Jefa de Gobierno.
El “modelo de ajuste Larreta” también fue sobre la salud pública, por eso residentes y concurrentes de los hospitales realizaron un paro histórico y la #MareaBlanca le arrancó un aumento salarial luego de meses de conflicto.
Larreta, que se la pasa hablando de la “República” y los “valores democráticos” terminó el año en medio del escándalo de Lago Escondido, donde la filtración de chats involucró a su Ministro de Seguridad D´Alesandro (que se tuvo que tomar licencia por 90 días) y al fiscal de la Ciudad Mahiques.
La otra candidata de peso es Patricia Bullrich, quien levanta un discurso reaccionario de mano dura, atacando a los piqueteros y llamando a reprimir la movilización popular. Fue la responsable de los operativos represivos contra el pueblo mapuche que terminó con la muerte de Santiago Maldonado y el asesinato de Rafael Nahuel. Como parte del “ala dura” del PRO, coqueteó con una posible alianza con el neofacho de Milei y recientemente no repudió las acciones golpistas de los bolsonaristas en Brasil. Claro que no empezó su carrera política acá, sino que durante los 90 estuvo con el peronismo y fue ministra durante el gobierno de la Alianza de De La Rúa.
Otra de las patas de Juntos por el Cambio son los radicales, que ya gobernaron, primero con Alfonsín y luego con De la Rúa-Chacho Alvarez, llevándonos al hundimiento con la crisis del 2001. Fueron repudiados con la movilización popular bajo la consigna “que se vayan todos”, y tuvieron que dejar el gobierno.
Juntos y el peronismo son los responsables de la crisis del país y van por más ajuste. Por eso cuando las encuestas dan un gran porcentaje de electores que dicen que el peronismo no va más, que quieren “algo nuevo”, les decimos que la salida no pasa por apoyar a Juntos sino apoyar al FIT Unidad.