Escribe Claudio Funes
La generala de cuatro estrellas Laura Richardson habló para el Atlantic Council, un think tank ligado a la OTAN.
“¿Por qué es importante América latina?”. Esa fue la pregunta retórica de la jefa del Comando Sur de Estados Unidos. De inmediato, la generala norteamericana, que estuvo de visita por el país el año pasado y fue recibida por Cristina Kirchner en su oficina del Congreso, relató un listado de razones por las cuales el país norteamericano posa sus ojos en el resto del continente.
Destacó, en primer lugar, el triángulo del litio, zona estratégica que comparten Argentina, Bolivia y Chile. “60 por ciento del litio del mundo se encuentra en ese triángulo”, expresó Richardson y agregó que ese elemento es “necesario hoy en día para la tecnología”.
El recuento de Richardson no finalizó allí: otra de las razones por las cuales América Latina es importante para Estados Unidos resultó ser la concentración de “las reservas de petróleo más grandes”, incluidas las de “crudo ligero y dulce descubierto frente a Guyana hace más de un año”. “Tienen los recursos de Venezuela también, con petróleo, cobre, oro”, continuó la generala, quien también destacó la importancia del Amazonas, al describirlo como “los pulmones del mundo”.
Por último “tenemos el 31 % del agua dulce del mundo en esta región”, dijo Richardson. Con ese inventario, la jefa del Comando Sur dijo que a su país le queda “mucho por hacer” y “que esta región importa” ya que “tiene mucho que ver con la seguridad nacional y tenemos que empezar nuestro juego”.
Repudiamos las cínicas declaraciones de Richardson que expresan las intenciones del imperialismo yanqui de profundizar el saqueo de los recursos en la región, de la mano de acuerdos leoninos con las multinacionales extractivistas, rumbo que en nuestro país mantienen los distintos gobiernos patronales, como el de Macri antes y el peronista del Frente de Todos ahora.