Salario y jubilaciones
Aumento de emergencia
Que nadie gane menos que el valor de la canasta familiar, calculado por los trabajadores de ATE-Indec en 295.694 pesos. Reapertura de todas las paritarias para que se den los aumentos proporcionales a cada categoría.
Aumento de emergencia de las jubilaciones y que ningún haber quede por debajo de la canasta de la Tercera Edad, calculada en 202.064 pesos. 82% móvil.
Para no perder frente a la inflación, que el valor tanto de salarios como de jubilaciones se actualice mensualmente de acuerdo al aumento real del costo de vida.
¡Basta de impuestos al pueblo trabajador!
Eliminar el IVA a los productos de la canasta familiar y terminar con el impuesto al salario
Despareciendo el IVA de los productos de consumo popular, estos deberían bajar un 21%. Seguimos diciendo que el salario no es ganancia, y que se exima de dicho impuesto a todas las trabajadoras y trabajadores.
Para terminar con el desempleo y la falta de vivienda
Plan de viviendas populares creando trabajo genuino
Construir 500.000 viviendas por año generaría dos millones de puestos de trabajo, ayudando así el déficit habitacional, hoy calculado en 5 millones de familias sin un techo digno. Terminar con el congelamiento de los actuales planes sociales, otorgando los aumentos que hoy están solicitando los movimientos sociales combativos.
Basta de tarifazos, apagones y servicios deficientes
Reestatizar las empresas de servicios públicos privatizados
Poniéndolas a funcionar bajo la gestión de sus trabajadores y usuarios, con servicios de calidad y tarifas sociales para quien la necesite.
Educación y salud pública para todos
Aumentar los presupuestos respectivos, triplicándolos, para así resolver los problemas de infraestructura e insumos y que todos los docentes y trabajadores de la salud cobren salarios dignos.
¿Con qué plata se hace todo esto?
Suspensión inmediata de todos los pagos de deuda externa y ruptura del acuerdo con el FMI
Que los miles de millones de dólares que se van en pagos a los pulpos acreedores queden en el país.
Para terminar con la especulación financiera y la fuga de capitales
Nacionalización de la banca
Para que el ahorro de los trabajadores se use para dar crédito popular. No para que los banqueros se llenen los bolsillos con los intereses de las leliqs o faciliten la fuga de capitales.
¡Basta de negociados y chantajes de los monopolios agroexportadores!
Nacionalización del comercio exterior
Nuestras exportaciones deben generar dólares que ingresen al estado y desde ahí se decida cómo se utilizan para las necesidades del pueblo trabajador, no como sucede ahora que son divisas apropiadas por los grandes monopolios como Bunge, Cargill, Nidera o Cofco.
Terminemos con el saqueo de nuestras riquezas
Estatización del gas, el petróleo, el litio y todos los recursos naturales no renovables
Anular todas las concesiones. Creación de empresas estatales (YPF 100% estatal, recreación de Gas del Estado, etcétera) gestionadas por sus trabajadores y que, de común acuerdo con las comunidades locales en materia ambiental, pongan esos recursos al servicio del desarrollo y las necesidades de las mayorías populares.
Que paguen los ricos y las patronales y no el pueblo trabajador
Impuesto a las grandes fortunas y riquezas
Aplicar un impuesto especial a las grandes fortunas y a las superganancias de las empresas para que, ante la emergencia, la crisis la paguen los capitalistas y no los trabajadores.
Para terminar de verdad con la inflación
Control de precios y aplicación de la ley de Abastecimiento
Terminar con la farsa de “precios justos” o “precios cuidados”. Por un auténtico control de precios, que arranque por congelar todos los productos de la canasta familiar. Que se controle estrictamente su cumplimiento y que se aplique la Ley de Abastecimiento, que autoriza a multar, clausurar, encarcelar y hasta expropiar a quiénes lo violan.