Escribe Mariano Barba
Está en un impasse el conflicto docente en defensa de las condiciones laborales y la educación pública. El gobierno provocó este conflicto para avanzar con el ajuste en la provincia. El ataque contra los docentes se dio como parte del acuerdo entre el gobernador Rolando Figueroa y Milei a partir del acuerdo por la Ley Bases y las inversiones por RIGI. Ese acuerdo le permitió aprobar la Ley Provincial 3447 que impone un presentismo extorsivo, cuyo principal objetivo, en su artículo n° 8, es cambiar las condiciones de licencias y afectar sustancialmente a docentes que hacen suplencias. Exigen la derogación de esa ley y que se aumenten considerablemente las partidas de refrigerio que ascendían a 112 pesos por día y por alumno; y el arreglo de los establecimientos para enseñar y aprender en escuelas seguras. Producto de la lucha, esas partidas acaban de ser aumentadas a 350 pesos.
Posterior a las vacaciones de invierno comenzaron los paros semanales de 72 horas con acatamiento en la seccional Capital superior al 90 %, y en el interior del 60%. Hubo todo tipo de acciones, y sobre todo las marchas provinciales que fueron masivas, donde se destacaba el aporte de las seccionales opositoras. Reuniones distritales para garantizar el paro y permanencias masivas en Casa de Gobierno. Recibimos la visita de diputados del Frente de Izquierda que hicieron su aporte al fondo de huelga.
Pero el sábado 17 de agosto la Directiva Provincial de ATEN-TEP firmó un acta con el gobierno que lograba algunos avances menores, pero dejaba intacto el artículo 8° de la Ley que es el meollo del ataque al régimen de licencias. La respuesta de la docencia fue aplastante, ya que no solo se rechazó masivamente en las seccionales opositoras, con cerca de 3.000 participantes en Capital, sino que en muchas seccionales conducidas por el propio TEP la base se reveló y le dio la espalda. Se manifestó con mucha fuerza la bronca de la base contra la conducción provincial por el acta firmada y creció la confianza que vienen cosechando las conducciones Multicolor - Bermellón ATEN Capital y demás opositoras. La huelga continuó, boicoteada públicamente por Guagliardo, con miles de docentes marchando por la ruta hacia los puentes carreteros, y otra marcha provincial también masiva.
Como no lograron quebrar la huelga, el gobierno aplicó descuentos masivos. El fortalecimiento del fondo de huelga con aportes locales y la gran campaña nacional de solidaridad ayudó a afrontar el golpe de los descuentos y contrastaron con el abandono y aislamiento de la Ctera y las CTA.
Al no poder quebrar la huelga, la fuerza de la docencia encabezada por las conducciones combativas llevó a la conducción provincial a promover ante la justicia un pedido de inconstitucionalidad y una medida cautelar que suspenda la aplicación de la Ley 3447. Desde ATEN Capital se había exigido, al comienzo de la huelga, que se denuncie ante la justicia el ataque a las condiciones laborales. Ahora, el conflicto entró en un impasse exigiendo que el Tribunal Superior de Justicia otorgue la cautelar. Mientras esto no ocurra y la aplicación de la Ley esté vigente como hasta ahora, el conflicto sigue abierto y las medidas votadas están en suspenso. Si la resolución fuera negativa, la conducción provincial deberá convocar a las asambleas para aplicar las medidas votadas.