Escribe Fernanda Giribone
Iván Blacutt es padre de familia, docente universitario, militante de su gremio (Adiunju), de Conadu Histórica y dirigente de Izquierda Socialista. Fue, como tantas compañeras y compañeros de Jujuy, víctima de la represión y persecución que el ex gobernador Gerardo Morales llevó adelante con el objetivo de sostener su reforma constitucional represiva y ajustadora.
Tras la represión del 20 de junio (cuando se aprobó entre gallos y medianoche la nueva Constitución) de entre los miles y miles de manifestantes, veinte personas fueron acusadas y el 13 de julio de 2023, nueve de ellas fueron detenidas. Aunque se pedían 40 días de prisión preventiva, cuatro días después fueron puestos en libertad. La liberación de Iván y de todos los compañeros de esa causa, sorteando la preventiva fue un triunfo de la movilización popular y de la enorme campaña nacional e internacional que en ese momento se realizó en contra de la criminalización de la protesta.
Iván cosechó así una parte de lo que su larga militancia social y política en la provincia le permitió cultivar. Recogió la solidaridad desde pueblos originarios (a cuyo lado estuvo en horas difíciles), de sus innumerables alumnos de las colonias, del apoyo escolar de comedores, y de sus estudiantes de la Universidad Nacional de Jujuy, quienes no dudaron en reclamar “libertad a nuestro profe”.
Se sumó también al pedido de familiares, compañeros y alumnos las declaraciones de repudio de decenas de sindicatos a lo largo del país. También múltiples personalidades de la lucha por los Derechos Humanos se sumaron al pedido de Izquierda Socialista y la UIT-CI.
Sostenemos que la movilización que llevó adelante el pueblo jujeño respondió a una verdadera rebelión popular que, amparada en la unidad entre distintos sectores (trabajadores, gremios combativos, estudiantes, partidos políticos de izquierda y sobre todo las comunidades originarias), plantearon el “No a la reforma” y emprendieron un plan de lucha contra el ajustador y represor gobierno de Morales.
Denunciamos una vez más que, en el marco de estas protestas, hubo violentas represiones con heridos, secuestros, allanamientos ilegales y detenciones arbitrarias. En este contexto es que nuestro compañero se encuentra procesado también por la Justicia Penal y ha recibido una multa millonaria por ejercer su legítimo derecho a la protesta.