En una declaración pública, la Mesa de Coordinación del Plenario del Sindicalismo Combativo, los Movimientos Piqueteros y Jubiladas y Jubilados en Lucha se pronunció contra la propuesta de reforma laboral de Javier Milei, el FMI, los gobernadores y las patronales. Señalaron que es falso el argumento de que la reforma permitirá blanquear a las y los trabajadores no registrados, precarizados, o generar empleo formal. Afirman que su único propósito es profundizar el ajuste. Para el sindicalismo combativo, este proyecto nefasto pretende que todas y todos quedemos sometidos a condiciones de precarización, sin derechos ni estabilidad laboral. Las “reformas estructurales” buscan ampliar beneficios al capital.
La declaración denuncia la responsabilidad de los gobernadores que aplican el ajuste de la motosierra y la licuadora en todas las provincias. Esto incluye no sólo a la “oposición dialoguista”, sino también al peronismo, con figuras como Osvaldo Jaldo en Tucumán y Raúl Jalil en Catamarca, que llaman a apoyar la reforma laboral. También denuncian la complicidad de la burocracia sindical con el gobierno de Milei, ya sea firmando paritarias a la baja o sentándose a negociar la reforma con Gerardo Martínez. Para el Plenario del Sindicalismo Combativo, los Movimientos Piqueteros y Jubilados en Lucha, la CGT no cumple ningún rol en la organización de la lucha y termina formando parte del dispositivo de gobernabilidad de Milei hasta 2027, además de alinearse con la interna del peronismo.
La reforma laboral que impulsa el gobierno, sostiene la declaración, amplía la jornada laboral, flexibiliza convenios y reduce costos empresariales. Incorpora el concepto de “salario dinámico”, es decir, atado a la productividad, lo que implica mayor superexplotación. Entre los principales retrocesos se destacan la creación de bancos de horas que eliminan las horas extras, las modificaciones regresivas en las indemnizaciones y los cambios en el régimen de vacaciones. La reforma no genera trabajo genuino: profundiza la destrucción del empleo.
Es una reforma esclavista. Tenemos que organizarnos para derrotarla mediante una gran campaña nacional contra la reforma laboral. Desde el Plenario del Sindicalismo Combativo, los Movimientos Piqueteros y Jubilados en Lucha planteamos impulsar la coordinación y la organización desde abajo para frenar el proyecto de Milei. Exigimos que la CGT rompa su pacto con el gobierno. Necesitamos un paro activo y un plan de lucha nacional de la CGT y las CTA para derrotar la reforma laboral esclavista y el plan motosierra de Milei, Donald Trump y el FMI. La victoria del Garrahan, lograda mediante un plan de lucha y movilización consecuentes, demuestra que se puede quebrar el brazo al gobierno.
Lea el texto completo de la declaración en www.izquierdasocialista.org










