Escribe Daniel Vera, Militante de Izquierda Socialista, Miembro de la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos de Argentina

El pasado jueves 8 de julio, llegó a su fin el juicio contra el cura Agustín Rosa Torino en la conservadora Salta. Después de un cuarto intermedio, hubo veredicto: fue condenado a 12 años de prisión por abuso sexual.

El 30 de abril recibió la misma condena el cura Juan de Dios Gutiérrez en Catamarca.

Haciendo nuestra una canción, les sobrevivientes gritamos con fuerza “¡que suene a victoria cuando rompa el silencio!”.

Porque la fuerza del movimiento de mujeres y disidencias aquí y en el mundo marcó el rumbo y ya no nos callamos más. Por eso las y los sobrevivientes de abuso sexual eclesiástico denunciamos a viva voz todos los delitos que comenten amparándose en ese poder nada “celestial” y muy terrenal que construyeron a lo largos de siglos de dominación y monopolio de la cultura y la moral occidental. La iglesia ya no podrá ocultar sus aberraciones y abusos.

El ABUSO no es “un pecado”: ¡es un DELITO! La iglesia pretende enmarcarlos en su “derecho” para mantener la impunidad que los gobiernos de casi todo el mundo les han otorgado, representando casi un Estado dentro de otros Estados. Las denuncias al interior de la Iglesia solo sirven para mantener la impunidad. Ni siquiera se disculpan con las víctimas.

En el marco de esta lucha por la separación de la iglesia del estado, el próximo viernes 16 a las 11:00 presentaré la denuncia penal no solo contra quien me abusó físicamente sino contra toda la diócesis de Río Cuarto, quien en este caso ofició de cómplice y encubridora.

La SEPARACIÓN de la IGLESIA del ESTADO es urgente.
Por la vida y el derecho de todas las personas que no están representadas en su pretendida moral.
Por el justo castigo de los delitos cometidos por sus integrantes y encubiertos por la Iglesia.
Basta de intromisión de la Iglesia y su falsa moral en la vida de las personas y en los asuntos del Estado.
Basta de privilegios económicos a los miembros e instituciones de la Iglesia.

CASTIGO A LOS CURAS Y LAS MONJAS ABUSADORAS Y A SUS CIENTOS DE CÓMPLICES!!!

SEPARACIÓN YA DE LA IGLESIA DEL ESTADO!!!