Redacción de Izquierda Socialista y de El Socialista
La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner se manifestó contra el derecho al aborto cuando fue consultada por el periodista Víctor Hugo Morales. Su postura se basa en una experiencia personal traumática por la que tuvo que pasar producto de un aborto espontáneo. Nadie puede discutir lo traumática que pudo haber sido esa experiencia, pero lo cierto es que un gobierno no puede negar un derecho para todas las mujeres por una experiencia personal por más traumática que haya sido.
Escribe Gabriel Massa
Como en las últimas semanas, Cristina volvió a aparecer en un reportaje, ahora radial, con Víctor Hugo Morales, en el que insistió en buscar la unidad con el resto del peronismo. Al mismo tiempo intenta atraer el voto de los más jóvenes. El resultado es que queda cada vez más claro por qué no es la alternativa para enfrentar al gobierno.
En 2015, durante la campaña electoral, Cambiemos jugó fuerte alrededor de la figura de María Eugenia Vidal. Era lo “nuevo”, una candidata recién llegada a la política y la apuesta fuerte de Macri para la provincia de Buenos Aires.
El gobierno de Cambiemos aspira a fortalecerse en las elecciones para aplicar una nueva etapa de su ajuste. Con el título de “reformas” se vienen la laboral (flexibilización), la fiscal (ajuste del Estado), la previsional (suba de la edad jubilatoria) y la educativa (la famosa “secundaria del futuro”).
Escribe José Castillo Candidato a diputado nacional Izquierda Socialista Frente de Izquierda Ciudad de Buenos Aires
Escribe Juan Carlos Giordano Diputado nacional Izquierda Socialista • Frente de Izquierda
El gobierno reconoció que después de las elecciones se viene una reforma laboral. Se trata de más flexibilización al servicio de aumentar las ganancias de los empresarios. Macri y Triaca ya vienen implementando cambios a la baja en los convenios colectivos. Lo hizo con los petroleros de Vaca Muerta y otros gremios, sacando conquistas laborales, con el aval de la podrida burocracia sindical. Esta reforma ya se votó en Brasil y también se está aplicando en otros países.