Escribe Adriana Astolfo Secretaria General Adosac Pico Truncado
Los medios nacionales anunciaron con bombos y platillos un acuerdo entre Macri y Alicia Kirchner. El gobierno nacional entregaría a Santa Cruz un adelanto de coparticipación de 750 millones de pesos en tres cuotas y un préstamo de 1.200 millones de pesos en cuatro bimestres. A cambio, la gobernadora se compromete a un recorte de gastos del estado provincial y municipios para “reducir el déficit fiscal” y quedar en cero en 2020. Y se conformaría una “Mesa de diálogo” provincial con los partidos y dirigentes sindicales para discutir el fin del sistema electoral de ley de lemas, una reforma judicial y encaminar la situación de las represas hidroeléctricas paralizadas. También el gobierno busca cómo imponer el pase de las jubilaciones a Nación, recortando los derechos de los trabajadores estatales.
Sintéticamente, el gobierno nacional no pone un peso, ya que sólo adelanta la coparticipación y otorga un préstamo que deberemos pagar los santacruceños. Y la promesa de que Alicia, junto a Cambiemos y burócratas sindicales, tratarán de profundizar el ajuste en la provincia. Los que perdemos seremos los trabajadores y el pueblo de Santa Cruz.
Una muestra del carácter de este acuerdo es que la gobernadora Alicia Kirchner y el ministro Marcos Peña festejaban un acuerdo que recién se efectivizaría en 15 días, mientras los docentes, estatales, judiciales, médicos, jubilados, seguimos en lucha con cobros escalonados y sin aumento salarial, mientras los viales se suman con 72 horas de paro.
Es por eso que el Congreso de Adosac volvió a votar seguir con el paro esta semana, comenzando junio sin que haya habido clases en 2017. Y la Mesa de Unidad Sindical (MUS, que coordina sindicatos estatales) resolvió un paro provincial con movilización en Río Gallegos este miércoles 7 de junio. Es necesario que la CGT y la CTA llamen a la huelga general de la provincia. Y que, como venimos reclamando desde Izquierda Socialista, se nacionalice la lucha. La Ctera debe dejar de mirar para otro lado y llamar al paro nacional docente. La CGT y CTA nacionales deben convocar a medidas de apoyo a la lucha de los trabajadores santacruceños. También hay que organizar delegaciones de trabajadores docentes y de otros gremios de Santa Cruz a Buenos Aires, para llevar nuestro conflicto al gobierno de Macri reclamándole que ponga la plata de una vez.
También desde Izquierda Socialista y la agrupación Docentes en Marcha reiteramos nuestro llamado a toda la oposición nacional docente a convocar a una nueva reunión nacional para coordinar el apoyo a la lucha de Santa Cruz y enfrentar el ajuste de Macri y los gobernadores.
Mientras, le seguimos exigiendo a Alicia Kirchner que ponga fuertes impuestos y retenciones a las multinacionales mineras, petroleras, gasíferas y pesqueras que explotan nuestras riquezas naturales. Que se expropien las empresas adjudicadas con corrupción y que Cristina y sus testaferros kirchneristas vayan presos y devuelvan la plata. Con esos fondos se pueden resolver los problemas del pueblo santacruceño.
