Escriben Armando Aligia* y Rodolfo Sanchez**, investigadores de CNEA y de Conicet en el Instituto de Nanociencia y Nanotecnología, dirigentes de Izquierda Socialista/FIT Unidad - Río Negro.
Milei arremete contra todos los entes públicos, prometiendo cerrar todos aquellos, según su visión privatista, que no sirvan. Entre ellos, mencionó explícitamente al Conicet. Su propuesta es “tal como existe hoy, hay que cerrarlo”, y fundamentó comparando el número de empleados del Conicet, que según Milei son 35.000 contra unos 17.000 de la NASA. Y redondea diciendo “el Conicet no produce en línea con lo que produce la NASA. Entonces, el tema de la productividad es bastante importante, me parece que la NASA produce un poquito más”. Ignora, adrede, que la NASA solo investiga lo referido a la aeronáutica y el espacio, mientras el Conicet centraliza la investigación de todas las ramas del conocimiento.
El consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas – Conicet- creado hace 65 años tiene como función, como lo indica su nombre, la realización de actividades científicas y tecnológicas en distintas áreas del conocimiento, aportando importantes descubrimientos y avances en ciencias agrarias, ingeniería de materiales, ciencias biológicas y naturales, y mucho en las ciencias médicas donde tienen un trabajo en pleno proceso de avances para la creación de una vacuna contra distintos tipos de cáncer. También con aportes científicos sobre el espacio, el clima, la cohetería, etcétera. El Conicet, entre 8.000 Instituciones similares en el mundo, está entre las primeras 150. Cuenta con 310 Institutos en codependencia con universidades nacionales y otras instituciones ligadas al sistema científico tecnológico nacional. Uno de los polos científicos más avanzados y prestigiosos es el que está instalado en Bariloche.
La política de Milei es una barbaridad de cabo a rabo, y desató una catarata de críticas. Un antecedente de sus ideas las podemos encontrar en Domingo Cavallo, que cuando fue Ministro de Economía mandó a los científicos “a lavar los platos”. Cavallo fue ex funcionario de la dictadura, ex ministro de Menem y De la Rúa (que terminó en el argentinazo del 2001), y ahora ultra reivindicado por Milei. También, bajo la dictadura se atacó a los científicos argentinos, cuando Martínez de Hoz (ministro de economía de Videla) paralizó la investigación sobre la energía atómica.
Milei toma esas banderas de Cavallo y las eleva a propuesta de gobierno a aplicar desde diciembre. Liquidará el Conicet, quitará presupuesto a todos los procesos de investigación de distintas áreas del conocimiento para reemplazarlo por cuatro secretarias, que estarían limitadas y controladas por una Ministerio de Capital Humano y tendrían la misión de impulsar la investigación privada, al criterio de la ganancia empresarial. O sea, desmantelará todo apoyo estatal a los científicos. Una política totalmente sometida al control del imperialismo y traerá la total dependencia científica de nuestro país. Milei tiene como banderas de referencia las políticas de Estados Unidos e Israel según sus repetidas declaraciones al respecto. Y encima solo cree en los programas de los economistas de Chicago, a tal punto que sus famosos cuatro perros tienen nombres de esos economistas, y su asesora de “lujo”, su hermana, dice que tiene “diálogo científico” con esos asesores caninos.
Desde Juntos por el Cambio también promueven el achique del presupuesto como parte del ajuste que preanuncia Patricia Bullrich. Y recordemos que fue Mauricio Macri que en su momento dijo “ponen lavarropas en órbita” despreciando la actividad científica y el progreso en materia satelital obtenido por una empresa estatal en Bariloche, que además exporta reactores nucleares, radares y aparatos de medicina.
Desde Izquierda Socialista y el FITU, repudiamos totalmente esta postura de Milei, y exigimos lo opuesto, que se fortalezcan los presupuestos para la investigación (hoy alcanza a solo el 0,3 % del PBI), política que no hace el actual gobierno del peronismo, ya que los sueldos y las partidas destinadas están totalmente achicadas al punto que proyectos importantes son suspendidos y la importación de insumos indispensables están paralizados por el desastre económico de Massa y compañía que prioriza el pago de la deuda al FMI por sobre toda inversión pública.
En esta campaña electoral, con las candidaturas del FITU encabezadas por Myriam Bregman, seguiremos apoyando las luchas de los científicos y empleados del Conicet y bregaremos por que se aumente el presupuesto para investigación científica, indispensable para la tarea de independizarnos del imperialismo y las multinacionales y terminar con el colonialismo en la innovación.
(*) candidato a intendente de Bariloche.
(**) Director del INN
