El domingo 30 de julio, el gobierno de Maduro hará elecciones de una asamblea constituyente que es fraudulenta por donde se mire, una maniobra burda para perpetuarse en el poder. Por eso en vez de apaciguar ánimos logra lo opuesto, que crezca el repudio masivo. La semana pasada hubo un paro nacional y marchas. Esta semana varias organizaciones sindicales han convocado a una huelga general de 48 horas y a nuevas protestas.
Escribe Laura Marrone Legisladora porteña y candidata a diputada nacional
Si doblás por Arenales, Corrientes o cualquier callecita de Buenos Aires, vas a ver personas acurrucadas por el frío, durmiendo a la intemperie, durante la ola de frío más dura de los últimos años. Niños que nacieron y viven en la calle. Trabajadores despedidos. Inquilinos desalojados. Un espectáculo que lastima bajo la indolencia del gobierno de Cambiemos que miente.
Escribe Juan Carlos Giordano, Diputado nacional por Izquierda Socialista en el FIT.
El planteo de expulsión de Julio De Vido de la Cámara de Diputados por “inhabilidad moral” es una maniobra electoral del macrismo. De ningún modo ayuda a que vaya preso y devuelva lo robado.
Escribe Simón Rodríguez
El dirigente del PT fue condenado el 12 de julio a nueve años y medio de cárcel en el primero de cinco casos de corrupción por los que se lo enjuicia en el marco del operativo Lava Jato. La condena es por “corrupción pasiva” y lavado de dinero, debido a su rol en el esquema de Petrobras, la petrolera de propiedad mixta. A cambio de contratos de la petrolera, Lula habría obtenido un soborno valorado en 1,1 millones de dólares por parte de la constructora OAS, mediante un departamento tríplex de lujo en la costa del estado de San Pablo. La propiedad figura formalmente a nombre de OAS, pero el ex presidente de la empresa Leo Pinheiro admitió que Lula le pidió no ponerlo a su nombre hasta que no culminaran las investigaciones del Lava Jato. Pinheiro también fue condenado.
Reproducimos declaraciones de Orlando Chirino, dirigente del PSL y de la corriente sindical clasista C-cura, dando apoyo al paro cívico, que será tomado por el pueblo venezolano para volver a repudiar a Maduro y su ajuste. El PSL levanta consignas propias y propone la convocatoria de un encuentro sindical para organizar una huelga de los trabajadores y los sectores populares.