Los ataques van dirigidos contra los delegados del Sarmiento, Mónica Schlottauer (quien además es diputada electa por Provincia de Buenos Aires por Izquierda Socialista en el FIT), Edgardo Reynoso (también dirigente de nuestro partido), Luis Clutet y Rubén Maldonado, y el compañero de limpieza Julio Kapelinsky. Todo por un supuesto "atentado" contra los trenes. Nada más falso.
El "atentado" consistiría en residuos de basura fotografiados en un vagón. Una ridiculez. No hubo ningún atentado, daño, ni destrozo. Lo prueban los propios videos difundidos por el gobierno. Acusarlos con palabras propias de la Ley Antiterrorista es un verdadero despropósito y un ataque antiobrero pocas veces visto.
La intención de Randazzo es descabezar a los delegados que vienen enfrentando las mentiras de su "revolución ferroviaria". Es un ataque anti sindical en medio de un paro general, donde los ferroviarios ratificaron la medida por unanimidad en una asamblea de 800 compañeros.
Recordemos cuando Aníbal Fernández acusó sin pruebas a Sobrero (ver recuadro). Es el mismo gobierno que avaló la cadena perpetua sin prueba contra los petroleros de Las Heras.
Es una acusación falsa con el objetivo de perseguir, intimidar y desembarazarse de dirigentes combativos. Como en Lear, donde Pignanelli del Smata hizo de todo -con el respaldo de la patronal yanqui y el gobierno-, para echar a los delegados, a pesar de fallos judiciales que obligan a
reincorporarlos.
El gobierno no les "perdona" a los delegados del Sarmiento las denuncias que, de ser escuchadas, hubieran evitado la masacre de Once. Que presentaran innumerables pruebas demostrando el vaciamiento y la corrupción del grupo Cirigliano-TBA, empresario con quien el kirchnerismo sigue
haciendo negociados. Que sigan siendo fervorosos opositores a la lista Verde, afín al gobierno, de José Pedraza, burócrata que está preso por asesinar a Mariano Ferreyra. O que ahora, tras el paro general, los ferroviarios exijan un plan de lucha y la reapertura de las paritarias.
En más de diez años dirigiendo el cuerpo de delegados, han llevado a cabo su juramente inicial: luchar "por un sindicato al servicio de los trabajadores y un ferrocarril al servicio del pueblo". Enfrentando las privatizaciones menemistas que el kirchnerismo mantiene, y luchando por una
verdadera reestatización de todo el sistema ferroviario bajo gestión de trabajadores y usuarios. Donde todo se decide en asamblea y se hace lo que resuelve la base, no el oficialismo ni la gerencia.
Son los ferroviarios quienes defienden los ferrocarriles, no el gobierno. El kirchnerismo, por ejemplo, compró trenes que no andaban, dejándolos a la intemperie. Acusar a los ferroviarios que "no cuidan los trenes", es esquizofrénico. Los ferroviarios nunca van a atentar contra su fuente de trabajo porque, entre otras cosas, usan ese medio de transporte junto a millones de trabajadores y usuarios. El ataque es propio de funcionarios acostumbrados a viajar en autos lujosos y a vivir ajenos a la cruda realidad que sufren millones de necesitados.
Los ferroviarios se preparan para responder en forma contundente este nuevo ataque. La pelea no terminará hasta que se retire el desafuero y las denuncias. Con el antecedente de que todas las causas en su contra han sido archivadas, como parte de una caza de brujas sin sustento. Este
miércoles 10 harán una asamblea para ratificar un plan de lucha y el miércoles 17 se movilizan con otras organizaciones a Plaza de Mayo.
Han repudiado el hecho Hugo Moyano de la CGT, Micheli de la CTA, innumerables dirigentes sindicales, diputados y legisladores, la FUA, FUBA, entre tantas organizaciones. Se presentará un proyecto de repudio en el Congreso Nacional y se llevará a cabo una conferencia de prensa. Mientras la solidaridad internacional crece.
Llamamos a redoblar la campaña con la más amplia unidad entre distintas organizaciones y partidos. A repudiar este ataque con pronunciamientos y resoluciones de asambleas, comisiones internas y cuerpos de delegados. ¡No al desafuero de los delegados combativos del Sarmiento! ¡Abajo la criminalización de la protesta! ¡Si tocan a uno toca a todos! ¡Ni el gobierno ni esta justicia patronal tienen que meter sus manos en las organizaciones sindicales! ¡A los dirigentes los eligen los trabajadores, no el gobierno!
Sícaro sigue en el cargo
Antonio Eduardo Sícaro era interventor en la CNRT cuando fue la masacre de Once. Tuvo que renunciar. Pero nunca se fue. Ahora trabaja en Transporte como asesor. (Perfil, 8/9). Asiste todos los días a la sede de Alem 168, contratado por su "probada experiencia y capacidad en el
transporte público", según fuentes ministeriales. O sea, los responsables de decenas de muertes siguen en la impunidad, mientras Randazzo persigue
a los ferroviarios.
El repudio llegó al Congreso
Impulsado por los diputados del Frente de Izquierda, se está haciendo firmar un proyecto de declaración repudiando el ataque a los ferroviarios en el Congreso Nacional. El próximo lunes 15 se llevará a cabo en una de las salas del Anexo de la Cámara de Diputados una audiencia pública con los diputados de los distintos bloques que lo apoyen y la presencia de los compañeros ferroviarios. También se presentó un proyecto en la cámara de provincia de Buenos Aires y se hará lo mismo en donde haya bancas del FIT.
Quema de trenes: Cuando Sobrero fue sobreseido
En 2011 Sobrero fue acusado de “quemar trenes” por un hecho acaecido años atrás. La causa fue tan burda que se fue desgranando por sí sola. Sobrero ni siquiera se encontraba en Buenos Aires el día del hecho. Estaba en Mar del Plata participando de la cumbre contra el ALCA. Detrás estuvo el gobierno. Aníbal Fernández dijo que había “semiplenas pruebas” contra Sobrero: una persona en situación de calle y la seguridad privada de TBA. Por la fuerte movilización y el repudio popular, sumado a lo endeble de la acusación, debieron dar marcha atrás. El “Pollo” fue liberado y finalmente
sobreseído. Igual que “Leo” Portorreal, el otro acusado. El juez de la causa tuvo que pedirle disculpas al dirigente ferroviario, reconociendo que no había elementos para culparlo.
El gobierno vuelve ahora a la carga, de la misma manera. Sin pruebas y lanzando ataques por televisión. Como ayer, las “armas” de los ferroviarios para defenderse son las mismas: la lucha y movilización.
El cuento chino de los trenes
Randazzo y Cristina llaman a “cuidar los trenes”. El gobierno le ha lavado la cara a las estaciones y defiende las nuevas formaciones chinas. Como dicen los familiares de las víctimas de Once, todo a un “costo altísimo”. Si no hubiera sido por las 52 muertes y más de 800 heridos, ni siquiera hubieran comprado un tornillo. Basta ver la postal de los más de 200 trenes chatarra que Jaime compró a España y Portugal que permanecen
abandonados (foto). ¿Eso no es un “atentado” contra el ferrocarril? ¿Quién responde por ese “daño” al pueblo argentino?
El gobierno compró 25 formaciones de ocho vagones cada una para la línea Sarmiento y 30 formaciones de seis coches junto a cuatro locomotoras para el Mitre por una cifra superior a los 500 millones de dólares. Muy por encima de las cotizaciones internacionales. En vez de volcar esos fondos para poner en pie la industria local, como tantas veces anunció, reincorporando a todo el personal despedido tras la privatización.
Currículum del ministro
El actual ministro de Transporte forjó su carrera política de la mano del menemismo (ver foto). Se incorporó a la gestión bonaerense de Eduardo Duhalde en el año 1992 como jefe de Gabinete de la gobernación. Durante toda la década ocupó distintos cargos (concejal y diputado nacional), siempre fiel al liderazgo de Menem. Más tarde, en 2002, se integró a la gestión del gobernador Felipe Solá, hoy massista, como jefe de Gabinete bonaerense. Fue un “soldado” de Solá hasta el final de su gobierno, en 2007, y de ahí ascendió como ministro del Interior, de la mano de los Kirchner. Siempre oficialista.
El ahora precandidato presidencial del FpV, en su intento por sacarse de encima al cuerpo de delegados combativo de la Bordó, acusa a los ferroviarios de tener sueldos abultados, buscando quitar legitimidad a sus reclamos y enfrentarlos con los usuarios. Randazzo es uno de los miembros del Gabinete que mayor fortuna posee. En su última declaración jurada, que corresponde a 2013, declaró un patrimonio de 4.135.544 pesos, ¡un 50 por ciento más que el año anterior! Tiene, además, diez propiedades y vive en un caserón de 800 metros cuadrados en Gonnet, cerca de La Plata. Repudiable.