Alicia dice que “heredó una provincia quebrada”… por el kirchnerismo. Que si Macri no manda plata o no permite más endeudamiento, no puede pagar salarios ni aumentos. Y, a cambio del apoyo de Macri, se compromete a profundizar el ajuste, recortando aún más los gastos del estado, sin nombramientos, atacando jubilaciones y demás medidas de ajuste antipopular.

Macri deja las manos libres a Alicia en su ajuste, exigiendo que lo profundice y deja que el kirchnerismo “se desgaste” electoralmente, aunque sea a costa del sufrimiento del pueblo.

¡Alicia descontó los sueldos a los docentes que paraban… por no cobrar! ¡Intimó con despidos, anuló el receso de invierno y amenazó con encarcelar a las directoras de escuelas que no enviaban listados de huelguistas y envió la policía provincial para desalojar las ocupaciones! ¡Ese es el verdadero rostro del kirchnerismo!

El pueblo santacruceño discute cuál es la solución. Algunos dicen que hay que esperar hasta octubre, votando por Cambiemos contra Alicia, como “voto útil”. ¡Pero Macri y Cambiemos ajustan igual! Lo que hace Alicia, hacen Vidal en Buenos Aires o Larreta en CABA.

Algunos partidos de izquierda que apoyan la lucha en Santa Cruz, como el MST, ante la enorme bronca popular proponen “Fuera Alicia” con una asamblea constituyente “para refundar Santa Cruz”. Equivocadamente plantean esperar las elecciones y una constituyente provincial para solucionar la crisis. ¿Una constituyente dominada por Cambiemos y el kirchnerismo puede resolver algo?

La solución, como plantean los compañeros de Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda, es profundizar la lucha para imponerle a Alicia y a Macri que aparezca la plata. No pagar a banqueros la fraudulenta deuda externa. No perdonar ni rebajar impuestos y retenciones a las multinacionales petroleras, mineras, gasíferas, pesqueras, que actúan en Santa Cruz. Sólo con esas dos medidas sobraría la plata para salarios, aumentos, salud, educación, vivienda, trabajo.

La CGT y la MUS deben convocar al paro provincial. La CGT, la CTA y la CTERA deben romper la tregua. Hay que nacionalizar el conflicto con una fuerte delegación docente que se instale en Buenos Aires para exigir que Macri y Alicia pongan la plata. Esa es la salida para la crisis. Y en las elecciones, sumar miles de votos para el Frente de Izquierda, que es lo que más les duele al kirchnerismo y el macrismo, fortaleciendo una alternativa política de los trabajadores y la izquierda.