Somos los docentes los que hemos enfrentado estas políticas de ataque a la escuela pública, reclamando que el gobierno nacional invierta el presupuesto necesario para sostenerla. Pero, aliados a los ajustes gubernamentales están los burócratas sindicales, fundamentalmente los kirchneristas de Ctera, Suteba, UTE, Amsafe o UEPC, como Baradel, Alesso, Yasky o Monserrat. También los massistas y radicales de la FEB, UDA y Udocba. Todos ellos han sido cómplices, abandonando las provincias a su suerte, y ahora van en las listas de esos partidos.
Por eso no es casual que los principales referentes del sindicalismo combativo docente, de las listas Multicolores de Suteba, Ademys, ATEN, Amsafe, Adosac, UEPC, como Jorge Adaro, Laura Marrone, Romina del Plá, Angélica Lagunas, Daniela Vergara, Isabel Guzmán, Silvia Fernández y Federico Wagner, entre tantos otros luchadores, vayan en las listas del Frente de Izquierda. Porque somos los únicos que proponen la anulación de la Ley de Educación, el Operativo Aprender y el Plan Maestro y los que reclaman la renacionalización del sistema educativo proponiendo que el gobierno nacional vuelva a ser el responsable del sostenimiento financiero de toda la educación del país, con plata para salarios e infraestructura y no para la deuda externa.