Mientras tanto, el gobierno de Cambiemos sigue hundiendo la salud y la educación públicas, privatiza las escasas tierras públicas y privilegia la especulación inmobiliaria y a las grandes empresas (muchas de ellas transnacionales) que aprovechan para hacer sus jugosos negocios en la Ciudad.
La gran pregunta, repetida año tras año, es cómo puede hacerlo si durante todo este tiempo no tuvo nunca mayoría en la Legislatura. Incluso ahora, que la han conseguido producto del “pase” de diputados que habían accedido al cargo desde listas formalmente opositoras, está muy lejos de las mayorías especiales que requieren muchas de las leyes aprobadas. La respuesta es simple: peronistas de todas las agrupaciones (kirchneristas o renovadores) y los radicales de Lousteau (fue embajador de Macri en Estados Unidos), que se presentan como “la oposición al macrismo”, terminan en nombre de la gobernabilidad y del reparto de los negociados entre las bancadas, garantizando los votos que necesita el gobierno.
Esto volverá a repetirse en esta elección. Daniel Filmus (otra vez) salió a pedir el voto en nombre de “frenar a Macri” copiando a Cristina, para que una vez electos sus legisladores “opositores” terminen votando a favor de las leyes macristas.
Desde la bancada del Frente de Izquierda, en cambio, nos hemos plantado en defensa de los trabajadores y los vecinos en todos y cada uno de los debates parlamentarios y en las luchas. Hemos denunciado el vaciamiento de los hospitales y apoyamos la lucha de los trabajadores de la salud. Apoyamos todas las peleas llevadas adelante por los docentes de la Ciudad y ahora por los estudiantes secundarios. Somos la única bancada que propone, frente a la finalización de la concesión del subterráneo y el balance desastroso de su privatización, que sea reestatizado y puesto a funcionar bajo gestión de sus trabajadores y usuarios. Por eso tenemos un gran desafío, que es ampliar nuestra bancada legislativa en las próximas elecciones.
Y también dar la disputa por alcanzar el diputado nacional, algo que se ha venido negando al FIT en la capital por el divisionismo de Luis Zamora. Contra su proyecto individualista, desde el FIT resaltamos la importancia de la organización y la lucha de los trabajadores, haciendo valer la necesidad de la unidad de la izquierda en una fuerza nacional que realmente sirva para enfrentar y derrotar el ajuste macrista.