Escribe Agustín Gigli, candidato a diputado nacional Chubut, por Izquierda Socialista/FIT Unidad
La escasez de agua que hay en Chubut es alarmante. No solo en pueblos aislados como Yala Laubat (a 40 kilómetros del proyecto megaminero Navidad, sin agua desde hace dos meses), también en ciudades como Comodoro Rivadavia la situación es preocupante. Ante esto, el gobierno de Arcioni presenta un proyecto de ley de emergencia hídrica para decir que hace algo, pero en realidad sigue protegiendo los intereses de quienes provocan esta situación. En lugar de quitarle el permiso de uso de agua a las grandes empresas (petroleras, Aluar y Pan American Silver), nos quieren responsabilizar a los trabajadores y la población en general diciendo que todo se solucionará a través de campañas de concientización en las escuelas.
No somos los trabajadores los que dejamos sin agua a la provincia, son las grandes empresas y los terratenientes que hacen un uso indiscriminado de este recurso vital.
La campaña la realizan con el titular del Instituto Provincial del Agua, Nicolás Cittadini, prometiendo obras como el azud del lago Fontana, planificada en 1947. Pero al mismo tiempo dicen que la provincia es muy extensa para controlar el uso del agua. Mientras, continúan impulsando la megaminería como única alternativa a la crisis. Para dar un ejemplo, en el proyecto Navidad se calcula un uso de 8 millones de litros de agua diarios, el equivalente al consumo de 160.000 habitantes. Y desde el gobierno nacional y la Corte Suprema de Justicia avanzan con la habilitación del proyecto Suyai, que demandaría un consumo de agua equivalente al de toda la ciudad de Esquel.
Necesitamos más diputados y diputadas de izquierda que enfrenten estas políticas de saqueo y contaminación. Por eso hay que organizarse y votar al Frente de Izquierda Unidad y la lista 1A Unidad de la Izquierda.