Escribe Noelia Agüero, legisladora provincial por Izquierda Socialista/FIT Unidad
En 2022 en Argentina hubo 233 femicidios, de ellos 19 sucedieron en Córdoba. Y comenzamos 2023 con cifras sumamente alarmantes y resonados casos de búsquedas de compañeras que casi siempre culminan en escenarios espantosos e indignantes.
En Córdoba la realidad demuestra que la desinversión es total en cuanto a la atención a las problemáticas que nos afectan a las mujeres y disidencias. Los números son escalofriantes: tres femicidios y transfemicidios en enero, seis en los últimos dos meses: Norma Quiñones, Rocío Lezcano, Sofía Sosa, Valeria Oviedo y Sofía Bravo asesinadas en el interior provincial y Anahí Bulnes, desaparecida desde el 5 de diciembre y cuyo cuerpo aún no ha sido encontrado pero las investigaciones indican que el asesino sería Santiago Campos Matos, quien se encontraba en libertad a pesar de haber sido denunciado por abuso sexual contra niñeces en 2019.
Mientras tanto el gobierno de Schiaretti levanta anuncios rimbombantes en cuanto a políticas de género inexistentes y sin presupuesto y sostiene, además, como bandera de campaña electoral un Ministerio de la Mujer que es un cascarón vacío: con programas completamente desfinanciados, con la precarización laboral de las trabajadoras a través de becas, contratos y monotributo y con la falta de respuesta integral ante las demandas en todo el territorio provincial.
El gobierno de Hacemos por Córdoba no pone un centavo para la lucha contra la violencia de género porque no es prioridad. Así quedó demostrado en el presupuesto 2023: se destinan, por ejemplo, 79 millones de pesos para refaccionar el Museo de la Mujer, en cambio solo se destina un millón de pesos para la creación de los Punto Mujer del interior provincial, donde se profundiza la violencia y crece el número de femicidios y transfemicidios.
Desde Isadora seguimos denunciando que el Ministerio de la Mujer y el gobierno de Schiaretti son responsables de esta terrible situación. Exigimos presupuesto ya para programas, refugios y toda contención necesaria para las víctimas de violencia de género; basta de precarización laboral a las trabajadoras del Polo de la Mujer. Exigimos justicia por las víctimas de femicidio y cárcel para sus asesinos.
Este 8 de febrero junto a la Asamblea Niunamenos Córdoba, a un mes del 8M, volvemos a las calles al grito de ¡Basta de femicidios y transfemicidios! ¡Los gobiernos son responsables!