Escribe Guillermo Sánchez Porta
En diciembre la Mesa Nacional del Plenario del Sindicalismo Combativo (PSC) correctamente definió llamar a una reunión amplia para organizar la marcha del 20 de diciembre con todos los sectores gremiales, sociales, piqueteros, de izquierda, de derechos humanos, ambientales, feministas, estudiantiles, que quisieran repudiar el Protocolo de Bullrich. Se comprendió rápidamente que era necesaria la más amplia unidad para derrotarlo y para enfrentar el ajuste que se vendría. La acertada convocatoria del PSC tuvo gran repercusión, más de 150 dirigentes asistieron al local de la AGD, entre ellos el Encuentro Memoria Verdad y Justicia, todas las organizaciones piqueteras combativas, Unidos x la Cultura, la ambientalista BFS, dirigentes de sindicatos como Suteba Tigre, ATE y CTA Sur, delegados, estudiantes, etcétera. Se debatió y acordó unánimemente los ejes de la convocatoria, mantener ese Espacio de Coordinación, citar a una nueva reunión en Ademys para sacar una declaración y organizar la columna del 20. Un verdadero éxito.
En la reunión en Ademys hubo dos comisiones. La de Declaración logró un buen documento programático y unitario, que se leyó en Plaza de Mayo. Sorpresa y malestar se generó en la Comisión de Organización, debido a que los compañeros del Polo Obrero (PO) y del Frente de Lucha Piquetero (FLP) cuestionaron las resoluciones de la reunión en AGD. Plantearon equivocadamente que el 20 de diciembre era una “jornada piquetera” convocada por el FLP en Parque Lezama. Que la cabecera debía ser sólo de piqueteros y del PSC, sin otras organizaciones ni partidos de izquierda y la columna encabezada por el FLP, el resto detrás.
Esta lectura equivocada de la realidad llevó al PO y al FLP a una política hegemonista y a dividir la marcha. Todos los sectores del espacio de coordinación (menos PO-FLP) decidimos marchar unitariamente por Diagonal Norte, con una cabecera común con todas las organizaciones. Una columna del PSC y sindicales con los organismos de derechos humanos, sociales y detrás, por sorteo, los movimientos piqueteros y partidos de izquierda. En cambio, por Diagonal Sur sólo marchó el PO y el FLP. Afortunadamente logramos salvar la unidad haciendo un acto común, donde se leyó la Declaración acordada.
Para el 27 de diciembre, en Tribunales se retomó la unidad, con una Conferencia de Prensa previa con todas las organizaciones del espacio de coordinación, llamando a una columna común independiente de la burocracia, que fue impactante al grito de “Paro general”. Esto ratificó y fortaleció la importancia de la unidad para luchar.
El 6 de enero se realizó una nueva reunión de la Mesa del PSC, para empezar a organizar la participación en el paro y marcha del 24 en Congreso. El PO y el FLP propusieron al PSC hacer un Encuentro Nacional de ocupados y desocupados el 20 de enero. Pero en la Mesa se acordó volver a reunir a todo el Espacio de Coordinación para organizar la columna común en Congreso, abriendo la unidad a nuevos dirigentes. Y sí evaluar la realización de un Encuentro nacional abierto de ocupados, desocupados y sectores en lucha para febrero, después del paro nacional. Lamentablemente los compañeros del PO y del FLP rechazaron esta postura, se negaron a sumar por ahora a la convocatoria del 17 de enero en Ademys y mantuvieron su Plenario el 20 de enero ahora con el Sutna, volviendo a su política divisionista equivocada. Llamamos a los compañeros del PO y del FLP a reflexionar, a terminar con su divisionismo y hegemonismo y seguir sumando unidad con el Espacio de Coordinación con el que venimos actuando donde además del PSC ya están convocando el EMVyJ, BSF, Unidxs x la Cultura, partidos del FIT y otros. Llamamos a participar a todos en la reunión del 17 de enero a las 17 en Ademys.
