Escribe Miguel Lamas, dirigente de la UIT-CI
Donald Trump anunció hace dos semanas que Estados Unidos iba a invadir Gaza y expulsar a un millón ochocientos mil palestinos que viven allí, hacia Egipto y Jordania. Que Estados Unidos sería “dueño” de la franja de Gaza y la convertiría en un lugar turístico. Este anuncio de Trump fue apoyado por el genocida Benjamín Netanyahu, pero repudiado mundialmente.
Los países europeos de la OTAN, Francia, Alemania, Gran Bretaña, España y hasta el semifascista gobierno de Italia (aún cuando todos apoyaron con armas a Israel) afirmaron que están en contra del plan de Trump. También rechazaron este anuncio los gobiernos árabes proimperialistas de Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes. Por su parte, Egipto y Jordania rechazaron que Estados Unidos expulse palestinos a sus países.
¿Dos estados?
Este rechazo a la propuesta de Trump de los países europeos de la OTAN está ligado al fracaso de Netanyahu en su intento de dominar Gaza por la heroica resistencia palestina y el enorme repudio y movilización mundial. Vuelven con la falsa propuesta de “dos Estados”, Palestina e Israel, que fue la hipócrita promesa imperialista con la creación del Estado sionista y expulsión de los palestinos de la mayor parte de sus tierras de origen. Y que en 1993, con los acuerdos de Oslo, fue aceptado por Yasir Arafat (líder palestino fallecido en el 2004), dirigente de Al Fatha, la histórica organización palestina.
Así quedaron cinco millones de palestinos encerrados entre Gaza y Cisjordania, un 22% del histórico territorio palestino. Pero Israel nunca aceptó en los hechos los “dos Estados”. Los palestinos fueron muchas veces atacados e Israel invadió y ocupó las mejores tierras de Cisjordania con 600.000 colonos sionistas traídos mayoritariamente de otros países. Y terminó convirtiendo a Al Fatah en una burocracia que hoy es la Autoridad Nacional Palestina y gobierna una parte de Cisjordania en la ciudad de Ramallah, y está sometida a Israel. Incluso, ha reprimido a la resistencia de palestinos contra Israel.
El objetivo imperialista de controlar Medio Oriente
El Estado de Israel fue creado por el interés imperialista yanqui y europeo de controlar Medio Oriente y sus riquezas naturales, en primer lugar los hidrocarburos.
Ahora, por primera vez y de forma expresa, un presidente norteamericano abandona este discurso y se muestra dispuesto a impulsar la expulsión de casi dos millones de palestinos de Gaza. Es la forma de hacer realidad el proyecto de conformar el “Gran Israel”, objetivo estratégico del sionismo, del Likud y del gobierno ultraderechista de Netanyahu.
Con esto prácticamente quedaría anulada la tercera fase del acuerdo del cese al fuego, que suponía la reconstrucción de Gaza, amenazando nuevamente las vidas de los palestinos.
Trump dijo hipócritamente que las personas que viven en Gaza deben irse porque “han vivido allí una existencia terrible”. Quiere ocultar que fue Israel, con armamento norteamericano, quien bombardeó durante años, con apoyo de los gobiernos yanqui y de la OTAN, lo que produjo estos crímenes de lesa humanidad. Mientras tanto Israel continúa con nuevos ataques en Cisjordania, el otro territorio habitado por palestinos a los que también quiere expulsar de sus tierras.
Continúa la heroica resistencia palestina
Sin embargo, ha sido la lucha del pueblo palestino de Gaza quien le respondió a Trump que no piensan irse de la Franja. Desde el “cese del fuego” del 19 de enero, centenares de miles de gazatíes, que se habían trasladado al sur producto de los bombardeos y la agresión sionista, están regresando al norte de Gaza con sus familias completas, con sus niños, en carros tirados por burros, con autos viejos o caminado con los pocos muebles que aún conservan. “Gaza es nuestro hogar”, dicen abiertamente, sabiendo que la mayoría de sus casas fueron destruidas por los sionistas. Su vuelta es la derrota del sionismo y de Trump. Esto es expresión de la heroica resistencia palestina.
Desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI), decimos que hay que retomar la movilización mundial contra el plan imperialista y de Netanyahu y su gabinete ultraderechista de expulsar a la población palestina de Gaza y Cisjordania, con el objetivo de completar la limpieza étnica iniciada por el sionismo en 1948 con la Nakba.
En especial es importante que la juventud norteamericana retome las calles, como hizo durante los acampes en las universidades, ahora para rechazar lo dicho por Trump, y avalado por el genocida Netanyahu. Es necesario que salgan a las calles los pueblos y la juventud de los países europeos, árabes y de Medio Oriente para reclamar a sus gobiernos el apoyo incondicional, político, económico y militar al pueblo palestino, y para exigir que los países que tengan relaciones con Israel, como Egipto o Marruecos, las rompan inmediatamente.
El movimiento internacional de solidaridad con Palestina debe ponerse nuevamente en pie, tal como se hizo para enfrentar y repudiar los bombardeos genocidas. Desde la UIT-CI llamamos a la más amplia unidad de acción internacional para repudiar los dichos del facho de Trump y derrotar todo intento de intervención militar en Gaza y en cualquier parte del mundo. Unidad para apoyar la lucha histórica y heroica del pueblo palestino de recuperar todo su territorio histórico y terminar con el estado racista genocida sionista de Israel y la intervención imperialista en Medio Oriente.