El 8M comenzó con otra provocación de Javier Milei estafador: en las cuentas oficiales de la Casa Rosada subieron un video institucional cargado de mentiras y falsedades, que van desde negar los femicidios hasta ir contra nuestro derecho a decidir, ganado con la histórica marea verde. Pasando por la ridícula idea de sostener que ahora las mujeres estábamos más cuidadas gracias a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y, su par en Justicia, Mariano Cúneo Libarona. Una jugada del gobierno ultraderechista que, lejos de amedrentar, sirvió para que más mujeres y disidencias sexuales se sumen a la convocatoria a la Plaza de Mayo y en todo el país.
Los medios televisivos no cubrieron la marcha que reunió a cientos de miles de manifestantes que salieron a la calle no solo por los derechos de las mujeres y disidencias sexuales, sino también por otros reclamos. Estudiantes en defensa de la Educación Sexual Integral (ESI) y la educación pública, docentes por aumento de salarios, trabajadoras estatales contra los despidos, madres e hijas y grupos de amigas que se organizaron para estar presentes con sus carteles pintados a mano. Muchas abuelas con sus nietas de la mano, levantaron el reclamo de aumento de jubilaciones y pensiones, como cada miércoles frente al Congreso, y contra el fin de la moratoria previsional, que dejará sin el derecho a jubilarse a nueve de cada diez mujeres.
Es que nosotras y las disidencias sexuales somos las más afectadas por la motosierra de Milei, que no para de atacarnos. Según el informe del Centro de Economía Política (CEPA), con datos del tercer trimestre de 2024, en un año se perdieron 15.748 puestos de trabajo en casas particulares, donde el 95% son mujeres. En otro sector feminizado como el docente, donde un 77% son maestras, sufrieron un recorte de salarios en términos nominales con la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), que representaba en promedio el 12% del sueldo. El programa Acompañar, de ayuda económica para víctimas de violencia de género, perdió 29,8% de su poder adquisitivo, a la par que se detuvieron las altas y se redujo de seis a tres meses el periodo de ayuda.
Todas estos reclamos estuvieron presentes en la marcha por el Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras en nuestro país. Desde Isadora y Disidencias en lucha, además homenajeamos a las mujeres y al pueblo de Gaza que resiste el genocidio perpetuado por el Estado de Israel. Tal como lo recordó nuestra diputada nacional de Izquierda Socialista/FIT Unidad Mónica Schlotthauer, en el acto de cierre en Buenos Aires, nuestra lucha como feministas socialistas es hasta lograr un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres. Te invitamos a que te sumes con nosotras y nosotres a dar esta pelea.
Isadora - Mujeres en Lucha y Disidencias en lucha