El 28 de mayo se llevó a cabo una nueva movilización de choferes encabezada por las líneas 60, la 148 y diversos cuerpos de delegados del AMBA.
Frente al despliegue de un gran operativo represivo, unos 300 choferes se dieron cita en la sede de la UTA central para manifestar su repudio al mísero acuerdo salarial firmado por la burocracia de Roberto Fernández, que lleva el salario inicial de 1.200.000 a 1.300.000 pesos. Se exigió, además, un plan de lucha que dé continuidad al paro nacional del pasado 6 de mayo, como lo vienen haciendo los choferes de base desde hace semanas junto a 37 cuerpos de delegados.
Pese a lo magro del aumento salarial y a que todavía perciben el 70% de sus grandes ganancias a través de subsidios del Estado, las patronales del transporte, en acuerdo con el gobierno nacional, decidieron trasladar el aumento a los usuarios, en su inmensa mayoría trabajadores y sectores populares, a través de un nuevo aumento del boleto que regirá en el AMBA a partir de junio.
Desde Izquierda Socialista y la corriente sindical A Luchar, acompañamos la movilización con una delegación de ferroviarios y seguiremos apoyando el justo reclamo de los choferes.
Corresponsal