Escribe Tata Gayone, precandidata a Concejal en Bahía Blanca por el FIT-U Lista 1A
La Unión Ferroviaria pidió ayer a la justicia el desalojo de 400 familias. Rechazamos el desalojo de las 400 familias, a la vez que exigimos planes de vivienda en forma inmediata por parte del estado
Un poco de historia
La privatización del Ferrocarril, el Puerto de Ingeniero White, la Junta Nacional de Granos y las empresas de energía generaron en la ciudad una oleada de despidos que nunca fue revertida. La desocupación, junto a la precarización laboral y el empobrecimiento creciente derivaron en la existencia de 32 villas y asentamientos precarios, en los cuales viven 8.444 familias, a la vez que el Registro único de postulantes da cuenta de una falta de más de 10.000 viviendas.
El año pasado, en plena cuarentena, familias sin vivienda se instalaron en los terrenos ubicados en la calle Don Bosco al 4.100 y comenzaron a construir. Son aproximadamente 400 familias amenazadas hoy por el desalojo. Se trata de tierras fiscales, pertenecientes al ferrocarril, que fueron otorgadas con un permiso de uso precario a la Unión Ferroviaria, por parte de la Administración de infraestructura ferroviaria, sociedad del estado, el 1 de marzo de 2010. La Unión Ferroviaria se comprometía a construir un plan de vivienda, cuya primera etapa debía estar cumplimentada en 365 días.
Pasaron diez años sin respuestas
Las tierras siguen ociosas, la UF no cumplió el acuerdo firmado con el gobierno, por lo que consideramos que no existen razones para reclamar el desalojo. Ni la Unión Ferroviaria, ni la justicia y ni el estado pueden ignorar la situación de emergencia laboral y habitacional que se vive en la ciudad y en el país. Llamamos a los sindicatos y organizaciones sociales, políticas y de DDHH a solidarizarse con los vecinos, a la vez de repudiar el pedido de desalojo.