Escribe Juan Carlos Giordano, diputado nacional electo de Izquierda Socialista/FIT Unidad.
Se acaba de dar a conocer el índice de inflación de 7% para agosto. El peor agosto de las últimas décadas. Otro mazzaso contra el pueblo trabajador. Siete de cada diez productos masivos aumentaron en el último mes. Cada día que pasa sube la pobreza culpa de una inflación que generan los grandes empresarios y el gobierno deja correr, siendo cómplice de la suba sideral de los precios.
Hace unas semanas el gobierno se reunió con los denominados 'gigantes' de la venta masiva. ¿Quiénes son? La Serenísima (Mastellone), Arcor, Molinos, Quilmes, P&G (multinacional yanqui) y Unilever, quienes representan casi el 70% de lo que se consume en las góndolas. ¿Qué les dijo el gobierno? Que no hagan “locuras ni picardías con los precios” y que “acompañen”. ¡Parece una broma! Nada de precios máximos, ni ningún castigo para estos delincuentes de guante blanco que engordan sus ganancias con los alimentos y productos básicos que necesitan millones.
Precios por las nubes, salarios, jubilaciones y planes sociales de pobreza e indigencia. Todo como parte de un brutal ajuste que el gobierno aplica para cumplir con el FMI. La CGT sigue apoyando al gobierno y Yasky y Baradel se reunieron con el embajador yanqui. Exigimos que estos burócratas rompan la tegua con el gobierno y las patronales y llamen a pelear por un inmediato aumento salarial y jubilatorio igual a la canasta familiar para paliar la enorme carestía de vida.