El hecho no tiene precedentes a pesar de que México es un país donde los asesinatos violentos son cosa de todos los días, llegando a cerca de 100 mil los registrados oficialmente durante la mal llamada Guerra contra el Narco, emprendida por el ex presidente Felipe Calderón y los dos primeros años de Enrique Peña Nieto. Porque ahora ha quedado clara la colusión entre gobernantes y grupos delincuenciales en contra del movimiento social, desde las propias instituciones del estado.
La indignación y el coraje han invadido a todos los sectores, pero particularmente a los jóvenes estudiantes que han emprendido una campaña permanente hasta lograr la aparición con vida de los 43 estudiantes, realizando paros en una multitud de universidades y tecnológicos, incluso privados, así como escuelas de educación media superior, realizando protestas en prácticamente todo el país y casi todos los días. De ahí las masivas movilizaciones que se han registrado.
Tanta fuerza e impacto han logrado, que obligaron al gobernador Aguirre Rivero, del PRD (Partido de la Revolución Democrática), a renunciar a regañadientes, pues venía siendo apoyado incondicionalmente por su partido a nivel nacional, en un acto vergonzoso que lo ha mostrado tal cual es, un partido corrupto al que solo le preocupa mantener sus cuotas de poder, por encima inclusive de un hecho tan abominable. El costo político de esa postura será seguramente demoledor.
Pero no es el único, porque en primer lugar la masacre ha golpeado directamente al gobierno de Peña Nieto, del PRI (Partido Revolucionario Institucionalista) por el silencio cómplice que guardó durante varios días, claves para actuar ante tan grave hecho, dejando escapar por ejemplo al presidente municipal, del que todas las agencias de "inteligencia" del gobierno mexicano ubicaban como un agente del narco.
Tampoco sale bien librado Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el principal "opositor" al proyecto de Peña Nieto, a quien en realidad lo mueve el interés de competir nuevamente por la presidencia en 2018 logrando el registro de su nuevo partido, el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), quien ha sido duramente criticado por la prensa mexicana, por sus estrechos vínculos con quien impulsó la carrera política de Abarca, Luis Mazón, quien todavía hasta ahora es el candidato designado por AMLO al gobierno de Guerrero. Por ello ha guardado un vergonzoso silencio.
La hipócrita critica del imperialismo
Por ello Peña Nieto fue fustigado por quienes hace apenas unas semanas lo enaltecían por sus logros, al imponer una larga lista de 11 contra reformas, donde destaca la energética, que abre la industria petrolera y eléctrica a las transnacionales, además de abaratar aún más la mano de obra de la clase trabajadora mexicana. En un hecho inusual el gobierno imperialista de Obama, la Unión Europea, distintos gobiernos latinoamericanos y otros, exigieron la clarificación de los hechos, criticando la omisión de su gobierno.
Crítica más que hipócrita, pues aunque amenazaron con romper los acuerdos comerciales que sostienen con México, no pasó de ser una amenaza, pues por supuesto que no dejarán pasar la oportunidad de explotar el petróleo mexicano y aprovechar la oportunidad de oro que les abre el gobierno de Peña Nieto, a pesar de ambas masacres.
La descomposición del estado capitalista
Desde hace largos años el estado mexicano ha sido infiltrado por los poderosos grupos de narcos, secuestradores y asesinos, quienes han estado extendiéndose en todo el país, bajo la complicidad de los gobernantes, a cambio de enormes cantidades de dólares corruptores que han proliferado entre las distintas instituciones. Jueces, militares, gobernadores, policías, e incluso presidentes se han doblegado con los jugosos cañonazos económicos, favoreciendo a distintos grupos delictivos.
Pero eso ha dado un salto, pues los grupos delictivos han decidido tomar directamente el control gubernamental en distintos niveles, particularmente en estados que son clave para su jugosos negocio, como el corredor que nace en el puerto de Lázaro Cárdenas en Michoacán, donde llegan los enormes cargamentos desde China de precursores de metanfetaminas para el procesamiento de las drogas. De ahí que el gobierno de ese estado (gobernador del PRI), ahora está comprobado, fue garante del tráfico de esas sustancias esenciales para los grupos delictivos quienes controlaban el puerto.
Y Guerrero es un estado vecino desde donde se puede garantizar el paso de las enormes cargas, siempre y cuando se tengan los mecanismos estatales para garantizar su paso. Ese es el fondo del caso del asesinato masivo de jóvenes normalistas, quienes osaron interrumpir el "informe" de la esposa del presidente de Iguala: Ángeles Pineda Villa, como presidenta del instituto gubernamental Desarrollo Infantil de la Familia (DIF), una de las "tradiciones" en México de los distintos gobernantes, pero que en este caso estaba señalada como la clara sucesora en la presidencia que ostentaba su esposo, se trataba de defender la continuidad del llamado narcogobierno.
Pero los hechos son de tal gravedad que provocaron un vuelco en la situación abriendo una grave crisis política, generando una enorme movilización que en el caso del estado de Guerrero ha llegado a niveles de una semi insurrección, que se expresan en el paro encabezado por la Coordinadora de Trabajadores de la Educación de Guerrero, que había realizado importantes movilizaciones contra la contra Reforma Educativa, impuesta por Peña Nieto, y ahora han tomado 22 alcaldías, apoyadas por amplios sectores de la población. Son ellos, junto con los familiares de los asesinados y desparecidos quienes deben asumir el esclarecimiento de los hechos, así como las tareas de gobierno en el estado de Guerrero, ante la putrefacción de todos los partidos patronales integrantes del actual régimen y del gobernador sustituto.
El estado capitalista en México está tocando fondo, demostrando que no brinda ninguna alternativa real para la población, exhibiendo su creciente dependencia tanto del imperialismo y de la delincuencia organizada para quienes gobierna. De ahí la necesidad de la búsqueda de nuevas alternativas, que necesariamente deberán surgir de los sectores en lucha.
Por eso la lucha central por la aparición con vida de los 43 estudiantes y el castigo a los culpables debe ir unida a la lucha ¡por derribar la contra Reforma Educativa impuesta por el gobierno de Enrique Peña Nieto!, que pretende privatizar la educación y desaparecer las normales rurales, así como el resto de sus contra reformas por lesionar gravemente los derechos laborales, sociales y culturales de toda la población. En la perspectiva de un cambio de fondo que solo podrá venir por un gobierno obrero, campesino y popular que acabe con el actual régimen corrupto, al servicio de los grandes capitalistas, incluidos los grupos delictivos, que termine con la actual crisis, abriendo mejores condiciones de vida para la población, terminando con la corrupción y entrega de los principales recursos.
En este marco, de una ampliación movilización de masas en México, la UIT-CI se suma a la exigencia de la juventud mexicana, de exigir la aparición con vida de los 43 normalistas desaparecidos, "Vivos se los llevaron,Vivos los queremos",como la primera tarea urgente, sumándose a la convocatoria a una nueva Jornada Internacional de protesta, para el próximo 5 de noviembre, llamando a las organizaciones políticas sindicales y juveniles del mundo a impulsar unitariamente actos y protestas en las embajadas de México , exigiendo:
¡Aparición con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa!
¡Por una investigación independiente de esos graves hechos, a cargo de los propios normalistas, del magisterio y sectores populares de Guerrero!
¡Castigo a los responsables, empezando por el presidente municipal José Luis Barca y su esposa, el ex gobernador con licencia Ángel Aguirre Rivero y los policías estatales y municipales que atacaron a los estudiantes!
Unidad Internacional de los Trabajadores, Cuarta Internacional - (UIT-CI)
30 de octubre de 2014