Macri y muchos medios de prensa quieren tapar ese masivo repudio popular en todo el país con el cuentito de la “violencia de los grupos minoritarios”. No dicen que esa respuesta la provoca la política de ajuste y la represión orquestada por el gobierno de Macri y su ministra Patricia Bullrich. Quieren tapar con esas imágenes que había más de 150 mil trabajadores y sectores populares en Plaza Congreso. Y que hubo movilizaciones en Córdoba, Neuquén, Rosario, Tucumán y otros lugares del país. Quieren tapar la salvaje represión desatada sobre la multitud con gases lacrimógenos y balas de goma. Quieren tapar que hubo un fuerte paro nacional pese al boicot del triunvirato de la CGT. Quieren tapar el cacerolazo masivo que surgió espontáneamente a la noche repudiando la represión y el proyecto de ley. Quieren tapar que miles volvieron a la noche al Congreso y volvieron a ser reprimidos. Pero cada vez les cuesta más ocultar la realidad.
Ya la movilización popular le había hecho fracasar la sesión del jueves 14 y derrotar la feroz represión. Fue tal el repudio que los gobernadores peronistas no lograban disciplinar a sus diputados. Finalmente, inventado el miserable bono y con un poco más de plata para sus provincias, lograron sumar sus votos. Los diputados del peronismo K posaron de “opositores”. Pero la realidad es que hacen “circo” parlamentario mientras su gobernadora Alicia Kirchner también firmó el pacto fiscal que está atado a la reforma jubilatoria y su último candidato presidencial Daniel Scioli se ausentó de la votación, mostrando su complicidad con el ajuste.
Le roban a los jubilados para pagar la deuda y salvar a los grandes grupos económicos
Macri le quita más de 100 mil millones de pesos a los jubilados con el cuento del “déficit” mientras le perdona impuestos a la Coca Cola, a Coto, a las mineras y a los grandes sojeros. Y sigue pagando millones de dólares de la fraudulenta deuda externa. Lo de los jubilados y los tarifazos profundiza el ajuste. Además van a tratar de seguir con despidos de empleados públicos, municipales, con la reforma laboral y el ataque al salario. Podemos derrotarlo.
Para eso hay que prepararse para seguir la pelea contra el ajuste en su conjunto. La lucha hay que organizarla desde abajo porque se necesita un cambio de fondo. Se necesita un plan económico de emergencia. Son los de arriba los que tienen que pagar la crisis. Basta de pagar deuda externa. Hay que imponer altos impuestos a los grandes grupos económicos. Plata para las jubilaciones, salario, educación y salud. Pudieron, por ahora, imponer la reforma previsional, pero hay que seguir la movilización como se empezó en apoyo a los jubilados. En semanas se provocó una rebelión popular que ni el gobierno, ni el peronismo, ni el triunvirato de la CGT esperaban. Macri se ha debilitado políticamente. Ganó solo una votación en el Congreso.
Tal ha sido el repudio popular en todo el país que los traidores del triunvirato de la CGT tuvieron que llamar a un paro nacional. Por supuesto que finalmente no lo llevaron hasta el final. El “triunvirato” de la CGT ni convocó a marchar al Congreso el 18. La UTA boicoteó el paro. Pese a ello tuvo gran repercusión. No podemos confiar en estos dirigentes. Desde abajo hay que organizarse y apoyar a los que luchan y estar en primera fila contra el ajuste como lo hizo el sindicalismo combativo y la izquierda. Hay que exigir a la CGT que rompa su pacto con el gobierno y que convoquen a un verdadero paro nacional y un plan de lucha. Llamamos a organizar y coordinar ese paro y plan de lucha a las CTA, a la Corriente Federal y demás sectores opositores junto al sindicalismo combativo, para seguir movilizados.
Plata para los jubilados. ¡No para la deuda!
¡No a la reforma laboral!
¡No al Pacto Macri-gobernadores peronistas-CGT!
¡Que la CGT rompa con el gobierno
y convoque a un paro y plan de lucha!