El pasado 7 de noviembre, 200.000 personas se movilizaron desde distintos puntos del país hasta la Plaza de España, en Madrid en lo que fue una de las movilizaciones más importantes del año, en medio de la crisis económica y social que vive Europa.
El Estado Español es uno de los países europeos con mayores índices de violencia machista. En lo que va de 2015, según el Ministerio de Sanidad, 84 mujeres fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, mientras que los juzgados reciben cada día 266 denuncias por violencia. Por eso más de 400 organizaciones feminsitas reclamaron el fin de la violencia machista y denunciaron los recortes presupuestarios del gobierno de Mariano Rajoy (Partido Popular), a los programas de atención y prevención de las violencias.
El documento que leyeron las organizaciones del Movimiento de Mujeres al culminar la movilización, señalaba que la violencia machista “es la más grave violación de los derechos humanos de las mujeres”. Y recordaron que se han asesinado a más de 1.300 mujeres desde 1995, siendo esto solo “la punta del iceberg”.
Tal como lo hicieron en 2012 cuando el mismo gobierno y el Vaticano intentaron asestarle un fuerte golpe a las mujeres con un proyecto de restricción del derecho al aborto legal, confiamos en que la movilización del movimiento de mujeres podrá ponerle freno a la violencia patriarcal y al ajuste que quiere imponer el gobierno de empresarios y clericales, frente a la crisis. En el Estado Español como en el mundo, las mujeres trabajadoras no vamos a aceptar que la crisis se descargue sobre nuestras espaldas ¡Adelante con la lucha, mujeres!