Más de 500 mil personas nos movilizamos en el país el pasado 3 de junio. Sin dudas se trata de una jornada histórica que va a dejar una marca en el calendario de la lucha de las mujeres. En cada ciudad y en cada pueblo, personas de todas las edades y géneros, de organizaciones sociales, políticas e independientes, por sobrevivientes de violencia de género como Karina Abregú y por personas solidarizadas con la causa, tomamos las calles para reclamar ¡Basta de femicidios! ¡Basta de violencia machista!
No se trató de una simple movilización que expresó la bronca por lo femicidios impunes de Chiara, Melina, Ana, Pamela, Rocío, Cristina, Maribel y tantos nombres más. En las calles, le exigimos a los gobiernos provincial y en particular, al gobierno nacional de Cristina Fernández, medidas concretas: la declaración nacional de emergencia en violencia de género para que se pueda trasladar ya presupuesto para la ley 26.845 de erradicación de la violencia contra las mujeres que garantizaría refugios, centros de atención a las víctimas y campañas de prevención; la creación de un registro único de denuncias y un observatorio nacional de femicidios; la aprobación de la ley para la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y el desmantelamiento efectivo de las redes de trata, entre otras medidas.
Pero a semanas de la histórica jornada, aunque todos los gobiernos se sacaron la foto ese día en la plaza y se manifestaron públicamente en twitter como la presidenta pasando por Macri, Massa, Carrió, el radicalismo y todos los gobiernos provinciales, las mujeres seguimos esperando respuestas concretas para terminar con este genocidio de mujeres que se ha cobrado la vida de al menos 1808 mujeres en manos de sus parejas o exparejas en los últimos siete años y cerca de 3500 por abortos clandestinos en el mismo período.
Tras la movilización, el gobierno nacional y los gobiernos provinciales solo se preocupan por tapar el tema y ordenar sus recursos económicos para la contienda electoral. Por eso, el único anuncio que el gobierno nacional realizó, fue la creación de un registro unificado de denuncias para dentro de "dos meses", medida necesaria pero evidentemente insuficiente ante el escenario presentado. Por eso, las Mujeres de Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda y los Trabajadores creemos que tenemos que seguir en la calles, discutiendo en cada lugar de trabajo, en cada barrio, en cada escuela y en cada universidad que el gobierno es responsable de la situación de las mujeres. Tenemos que denunciar y organizarnos para terminar con la impunidad de quienes nos golpean, violan y asesinan pero también, de quienes se jactan de ser gobiernos que respetan los derechos humanos mientras nosotras seguimos muriendo. Llamamos a todas las organizaciones de mujeres, de izquierda, estudiantiles, sociales y sindicales así como a todos aquellos que se vienen sumando a la campaña por #NiUnaMenos a mantener vivas las reivindicaciones que levantó la jornada del 3 de junio. Frente a la inmovilidad de los gobiernos responsables de la situación, preparémonos para movilizarnos a Plaza de Mayo y continuar con nuestros reclamos ¡Sigamos en las calles!