Escribe Graciela Calderón, secretaria adjunta Suteba La Matanza y diputada provincial Izquierda Socialista/FIT Unidad

La conducción kirchnerista de Ctera acordó con el gobierno un “marco general” paritario nacional. Un 40% de aumento para 2022, cuando la inflación superará el 55%. Ni recupera lo del 2021 y se corre detrás de la inflación.

En los últimos cinco años perdimos el 50% del poder adquisitivo. Además, el grueso del salario son bonificaciones, muchas que las y los jubilados no cobran y no corren para antigüedad, zona, título, etcétera. La burocracia de Ctera hace años liquidó el escalafón y permite que por igual trabajo se cobre diferente en cada provincia.

Las escuelas están con graves problemas de infraestructura; miles de docentes sin cargos y estudiantes sin docentes; trabajos precarizados y fuera de convenio.

El acuerdo con el FMI congelará el presupuesto educativo, impidiendo que haya fondos para resolver estos problemas, mientras sostienen los subsidios para las escuelas privadas. Quieren modificar el Estatuto Docente, con un “convenio laboral” para legalizar estos trabajos flexibilizados y sin estabilidad. Quieren hacer una nueva “reforma educativa”, cambiando la estructura y contenidos, reduciendo conocimientos y despidiendo docentes. Y quieren atacar el régimen jubilatorio docente, “de privilegio”, según los funcionarios.

Todo ese paquete, que comienza con salarios de pobreza, no fue cuestionado por la conducción de Ctera. Al contrario, llamó a la docencia a volver al trabajo, sin más.

Los burócratas de las provincias, Baradel, Guagliardo, Monserrat, López, cumplieron al pie de la letra esa política capituladora con los gobernadores.

No esperaban que el malestar se canalizara con paros y movilizaciones donde los docentes sí tuvieron posibilidad de opinar. En Santa Cruz el congreso de Adosac rechazó la propuesta de Alicia Kirchner, que apoyaba la burocracia Lila de Javier Fernández, y paró, incluso con conciliación obligatoria. La consulta provincial de Amsafe votó abrumadoramente un plan de lucha, dejando mal parada la burocracia de Alesso, que tuvo que parar en Santa Fe. En Neuquén, la burocracia provincial maniobró con el gobierno para desmontar el paro que había sido aprobado en asambleas masivas, pero decenas de escuelas no pudieron comenzar por falencias edilicias. En CABA, sólo Ademys llamó al paro y rechazó la propuesta de Larreta y, junto a los Suteba Multicolores que pararon o se movilizaron, realizaron una conferencia de prensa en el ministerio de Educación. En Chubut, Misiones, Río Negro, Jujuy, Chaco, Formosa, Entre Ríos, Salta, hubo paros.
La enorme adhesión al paro nacional de Ctera por el 8M (que la burocracia sólo impulsó con tímidos flyer) demuestra que motivos y ganas de luchar, sobran. Es la conducción la que lo impide.

La deuda es con la educación. Hay que exigir el pase al básico de todas las bonificaciones y un aumento que lleve el salario a igualar la canasta familiar; cláusula gatillo automática bimestral; volver a nacionalizar el sistema educativo y su presupuesto, con un 8% del PBI. Hay que dejar de pagar la fraudulenta deuda externa y eliminar los subsidios a la educación privada. Resolver los problemas de infraestructura, de cargos y terminar con la flexibilización en la docencia. Defender el régimen de jubilación docente. Frenar los avances de la reforma educativa.

Con estos reclamos, impulsamos una coordinación con diferentes provincias, para fortalecer sus luchas y exigir a la burocracia de Ctera y demás gremios, el paro nacional.
 

Escribe Mercedes Trimarchi, legisladora electa CABA por Izquierda Socialista/ FIT Unidad

Las demandas feministas estuvieron presentes en las plazas de las ciudades más importantes del país, que se colmaron de grandes movilizaciones que nuclearon a mujeres, disidencias, activistas feministas y organizaciones sociales y políticas en reclamo del #NiUnaMenos y mayor presupuesto para combatir la violencia de género.

Desde el mediodía en la plaza frente al Congreso comenzó el movimiento, para preparar la jornada con el armado de los escenarios, banderas y stands de las distintas organizaciones feministas con sus publicaciones y volantes por el #8M - Día internacional de las mujeres trabajadoras. La cita era a las 16, pero minutos antes ya las calles aledañas al Congreso estaban repletas. La imagen adelantaba lo que sería una gran jornada de lucha en la que se expresaron todos los reclamos feministas, como el aumento del presupuesto para combatir la violencia machista, la pelea por la igualdad salarial y el acceso a todos los puestos de trabajo, el reconocimiento de las tareas de cuidados y el rechazo al acuerdo del gobierno con el FMI que traerá un mayor ajuste para las mujeres y disidencias.

La indignación de la violación en grupo en el barrio de Palermo de la semana anterior (ver nota abajo) fue la gota que rebalsó el vaso para muchas mujeres, que decidieron marchar por justicia para la víctima y cárcel a los violadores. Hartas también de los femicidios y transravesticidios, que llegaron a 58 en los dos primeros meses del año según el informe del Observatorio Lucía Pérez.

Un cuadro similar se vivió en las distintas provincias del país y en sus principales ciudades, como Rosario, Córdoba, Santiago del Estero, San Juan y Neuquén solo por nombrar algunas. También allí las movilizaciones fueron masivas y reflejaron el hartazgo de las mujeres y disidencias frente a la violencia patriarcal que nos oprime.

Las trabajadoras, las más afectadas por la pandemia y la crisis

Tras dos años de pandemia, la crisis económica y social repercutió con mayor peso en las mujeres y disidencias. No solo fuimos las primeras despedidas sino que también, se evidenció como nunca antes que las tareas de  cuidado y de limpieza en el hogar recaen mayoritariamente sobre nosotras.

Por otro lado, la  pandemia también aumentó las desigualdades en el mundo del trabajo, como la brecha salarial (la diferencia entre lo que perciben las mujeres y los varones por el mismo trabajo) y la discriminación laboral (no tienen las mismas oprtunidades para conseguir empleos las mujeres que los varones). Así, por ejemplo, es común encontrar que los puestos jerárquicos son ocupados por varones incluso en las ramas feminizadas de la economía.

Es para destacar en este plano la pelea que las ferroviarias del Sarmiento vienen dando con la agrupación Mujer bonita es la que lucha para conquistar lugares que fueron ocupados históricamente por varones como por ejemplo la conducción de los trenes. Y que en las movilización del #8M en el Congreso participaron con una importante delegación que se sumó al bloque gremial junto los Sutebas combativos, Ademys y demás sindicatos que vienen denunciando a las burocracias sindicales como la CGT y las CTA, que apoyan el acuerdo del gobierno con el FMI.

Sumate a Isadora

Con Isadora e Izquierda Socialista participamos en varias ciudades de las movilizaciones del #8M. Nuestra organización es parte del movimiento feminsita y peleamos también por la separación de la Iglesia del Estado, la implementación de la ESI en todas las instituciones educativas y que sea laica, científica y con perspectiva de género. Peleamos para que haya presupuesto para la ley de IVE, que conquistamos con la lucha, y por la absolución de Miranda (única médica no objetora de conciencia en Tartagal-Salta) y que está siendo procesada por garantizar derechos. Por todas estas reivindicaciones vamos a seguir luchando y te invitamos a que te sumes a dar estas peleas junto Isadora.

Escribe Mercedes de Mendieta, diputada nacional electa por Izquierda Socialista / FIT Unidad

Seis varones violaron a una chica de veinte años en un auto estacionado en Palermo al mediodía. Una vecina fue quien vio la situación y junto a otros vecinos los detuvieron hasta que llegó la policía. El hecho conmocionó al país y hubo un repudio generalizado. Desde Isadora e Izquierda Socialista exigimos justicia para la víctima y cárcel a los violadores.

 Los imputados son Ángel Pascual Ramos (23), Lautaro Dante Ciongo Pasotti (24), Steven Alexis Cuzzoni (20), Franco Jesús Lykan (24), Tomás Fabián Domínguez (21) e Ignacio Retondo (22). Los seis están detenidos en distintas comisarías de la Policía de la Ciudad y hasta el momento se negaron a declarar. Ninguno tenía antecedentes penales. Uno de ellos vive en el barrio porteño de Villa Crespo, los demás en el conurbano bonaerense (San Miguel, Laferrere, San Martín y Vicente López). Tres de ellos iban a la universidad y uno militaba en la agrupación kirchnerista “Lealtad Vicente López”, el mismo que ya había abusado sexualmente (años atrás) de una chica de 14 años que al ver las imágenes se animó a denunciarlo, en solidaridad con la víctima actual.

Evidentemente el perfil del violador (individual o en grupo) poco tiene que ver con la imagen que socialmente se construye como un monstruo o un enfermo. Mas bien ocurre lo opuesto, los que violan son varones que tienen una vida aparentemente normal: no tienen antecedentes penales, van a la universidad y un fin de semana largo a bailar con amigos. Lo que ocurre es que en esta sociedad patriarcal los varones pueden violar cuando les da la gana y en cualquier lugar porque gozan de impunidad. No importa si es de día o de noche, quién sea la víctima (desconocida o su propia hija), si es en grupo o no. Lo que importa es someter y dominar el cuerpo de la mujer.
 
Los hijos sanos del patriarcado

Según las estadísticas del Ministerio de Seguridad de la Nación, en el año 2020 hubo 22.076 denuncias de mujeres por situaciones de abusos sexuales y violaciones: 60 por día. Un 43% más de denuncias que en 2019, cuando no había ni pandemia ni cuarentena. Esta cifra demuestra que los abusos y violaciones no son casos aislados ni que solo suceden en las calles o fuera del hogar. En la revista de Isadora “La Rebelión de las Mujeres” publicada en 2019, escribíamos en un artículo sobre la cultura de la violación que “Las violaciones son muy comunes y en muchos casos, naturalizadas. Por eso, se popularizó la frase que dice que un violador no es un enfermo, sino un “hijo sano del patriarcado”. Porque el sistema patriarcal, hace que las mujeres sean vistas como objetos de consumo y disfrute del mundo masculino, por lo tanto el hombre puede violarla, al considerarla de su propiedad. [...] Por ejemplo, la cultura de la violación sostiene que no es tan grave traspasar los límites de una mujer, que si un varón maltrata a una mujer y ella sigue con él, es culpable también; que si una mujer está borracha y no es capaz de articular un “NO” rotundo y oponerse con firmeza significa que consiente una relación sexual, etcétera.“
 
El doble discurso del gobierno

La Ministra de Mujeres Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta,  se refirió a los hechos en su cuenta de Twitter como: “no son “una bestia” ni una “manada”, sino “tu hermano, tu vecino, tu papá, tu hijo, tu amigo, tu compañero de trabajo”. Y siguió:  “Ninguno de los hechos que nos horrorizan son aislados. Todos y cada uno responden a la misma matriz cultural”. Desde ya que no compartimos las criticas de la derechista Patricia Bullrich que dijo que esas frases justifican la violación. Pero, sí denunciamos el doble discurso de Gómez Alcorta que es parte del gobierno y por lo tanto, responsable de la situación de las mujeres y disidencias quienes protagonizamos una gran jornada el 8M en la que denunciamos la falta de presupuesto para combatir la violencia de género. Desde Isadora e Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda Unidad nos solidarizamos con la víctima y pedimos justicia. Este hecho no puede quedar impune y los violadores deben ir a la cárcel.

Escribe Agxs Mermet

El viernes 11 de marzo desde Disidencias en Lucha nos movilizaremos junto a Autoconvocadxs por Tehuel -espacio en el que venimos participando desde su conformación- al cumplirse un año de que Tehuel de la Torre saliera a ganarse el mango y no volviera.

La exclusión laboral es moneda corriente para la gran mayoría de la juventud y particularmente de la comunidad travesti, trans, no binarie, que sufrimos el odio cissexista, la discriminación, y la violencia patriarcal tanto a nivel social como institucional. Nuestras condiciones de vida son totalmente precarias, situación que se agudiza con la crisis económica sostenida por el gobierno con ajustes y tarifazos.

La falta de acceso al trabajo nos expone a todo tipo de riesgos en la búsqueda de sustento económico, como demuestra el caso de Tehuel. Ante el transodio y las políticas de exclusión y hambre, con la movilización conquistamos el cupo laboral travesti-trans a nivel nacional. Por eso, decimos: ¡No al pago de la deuda, plata para la efectiva y real implementación del cupo laboral con puestos de trabajo genuinos!

¡El gobierno es responsable!

El pasado 8M desde Disidencias en Lucha nos movilizamos exigiendo ¡Aparición con vida de Tehuel Ya! Denunciamos que el Ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual no ha generado una sola política pública real y efectiva para combatir y prevenir las violencias que sufrimos. Esta situación empeorará con el acuerdo del gobierno con el FMI. Alberto Fernández, mientras se apresta a pagar la deuda ilegítima y fraudulenta a costa del saqueo a les laburantes, no pone un solo peso para garantizar a las disidencias el acceso a educación, salud, trabajo, y vivienda.

El ministro bonaerense Sergio Berni sostiene sus políticas de criminalización y represión, mientras que a Tehuel lo da por muerto. La fiscal de la causa, Karina Guyot, tomó la decisión de cambiar la carátula a “homicidio agravado por odio a la orientación sexual e identidad de género”, sin pruebas, sin haber encontrado un cuerpo siquiera. Los dos sospechosos, Ramos y Montes quedaron imputados por ello, pero mantienen el pacto de silencio. Denunciamos que esta es una decisión política con la que pretenden desligarse de cualquier responsabilidad y ahogar toda forma de organización y presión popular por la aparición de Tehuel, mientras sigue la impunidad.

Por eso, a un año sin Tehuel salimos a las calles por su aparición con vida. ¡Sumate a Disidencias en Lucha para pelear por nuestros derechos! ¡Que se reabra la causa y se retome la investigación! ¡Que no nos falte ni une pibi más!

El próximo 15 de marzo comienza el juicio a Higui, atacada por lesbiana y por defenderse de la agresión lesboodiante por parte de un grupo de varones que la golpearon y hostigaron por su expresión de género y orientación sexual. Durante el ataque Higui se defendió e hirió de muerte a uno de sus agresores, por ello estuvo privada de su libertad durante ocho meses y fue procesada bajo la carátula de homicidio simple cuando en realidad se trató de una agresión sexual impulsado por el odio.

“Yo salí por les pibis”

Tal como expresó Higui recientemente, fue la presión del movimiento feminista y disidente la que logró su excarcelación. Hoy tenemos el enorme desafío de seguir peleando por su absolución. Pese a que las disidencias venimos conquistando derechos como la identidad de género o el matrimonio igualitario, muchos de ellos no se garantizan y persiste el odio y discriminación hacia nuestra comunidad. El caso de Higui es emblemático porque el gobierno y su justicia patriarcal buscan disciplinarnos encerrando a una mujer lesbiana y pobre que se defendió de una violación colectiva.

Desde Izquierda Socialista, Isadora y Disidencias en Lucha exigimos la absolución de Higui y llamamos a todas las organizaciones políticas y sociales a participar de las acciones que se desarrollen, comenzando por el 15 de marzo en los Tribunales de San Martín para torcerle el brazo a la justicia heterocispatriarcal.

Disidencias en Lucha Córdoba