El gobierno de Macri ha montado una auténtica provocación contra la docencia universitaria. Como parte de su ataque más general a la educación pública, ofrece un 0 (cero) por ciento de aumento para 2017. Sólo ofrece “reajustes” a posteriori según la inflación. Se niega absolutamente a reconocer la pérdida salarial de 2016 y de lo que corre de 2017. Todo eso sobre sueldos que vienen cayendo sistemáticamente en los años anteriores.
Escribe Miguel Lamas
Prácticamente simultáneas con la lucha en Argentina, se están dando huelgas y movilizaciones de maestros en Brasil y Bolivia. Y por motivos bastante parecidos. Este hecho fue destacado en una carta en solidaridad con los maestros bolivianos, que enviaron a su organización sindical nuestros comparñeros Laura Marrone, maestra y legisladora porteña, y Jorge Adaro, dirigente de Ademys.
Escribe Guillermo Sánchez Porta
En medio del conflicto docente y de una multitudinaria e histórica marcha federal a plaza de mayo, Macri y el ministro de educación Bullrich salieron a anunciar “sus conclusiones” sobre la evaluación “Operativo Aprender” del 2016 y a lanzar el “Plan Maestro”. ¿Qué hay detrás de estos nuevos anuncios? ¿Macri y Cambiemos quieren mejorar la escuela pública?
Escribe Graciela Calderón, Secretaria Adjunta Suteba La Matanza
A casi un mes de iniciado oficialmente el ciclo escolar, en la mayoría de las provincias hubo más días de paro que de clases. En sólo cinco hubo acuerdos y los dirigentes que firmaron fueron repudiados por las bases, como en Jujuy que tuvieron que irse bajo insultos. Las luchas más emblemáticas son en provincia de Buenos Aires, Neuquén y Santa Cruz, pero el conflicto es nacional. Además, el gobierno se negó a convocar a la paritaria nacional, desconociendo a Ctera y a los sindicatos nacionales. Por eso Ctera convocó a tres paros de 48 horas semanales, con adhesión masiva y a una multitudinaria Marcha Federal a Plaza de Mayo.
El gobierno de Macri está haciendo gestiones en Estados Unidos para comprar armamento militar por 2.000 millones de dólares. Martín Lousteau, embajador argentino en Washington, elevó por escrito el pedido de aviones, helicópteros militares, tanquetas, misiles y vehículos anfibios. Se trata de armamento utilizado en la guerra yanqui contra Vietnam o en las invasiones a Irak, que han quedado obsoletos.