Los asistentes repudiaron enérgicamente la represión desatada por el gobierno mexicano contra los maestros huelguistas y padres de familia que bloqueaban una carretera en Nochixtlán, estado de Oxaca. Fueron masacrados por policías con helicópteros y armas de fuego: hubo más de 6 muertos y 50 heridos. Los maestros y padres se defendieron a piedrazos. Reclamaban la liberación de los dirigentes de la sección XXII de la CNTE (sindicato nacional de maestros) presos en penales de máxima seguridad.
Los docentes luchan contra una ley educativa que facilita la privatización de la enseñanza, ataca la estabilidad laboral y rebaja salarios mediante la “evaluación docente”. La huelga de los maestros está logrando enorme apoyo popular en los estados de Oxaca, Chiapas, Michoacán y Guerrero.
Desde Izquierda Socialista y la Unidad Internacional de los Trabajadores fuimos parte de este acto de repudio y enviamos toda nuestra solidaridad a los maestros mexicanos, poniéndonos a disposición para futuras jornadas internacionales de apoyo a la heroica lucha que están llevando adelante.