Es decir, ni cuestionar la devaluación, ni la escandalosa estampida inflacionaria, mucho menos imponer precios máximos a los productos de la canasta básica para proteger el consumo popular.
Binner esboza una propuesta para hacer pasar el ajuste… ¡“entre todos los sectores”! Nada bueno puede salir de reuniones entre gobiernos capitalistas, empresarios y burócratas traidores. El resultado, ya conocido: los salarios pierden por goleada con la inflación.
Un ejemplo de esta política “socialista”, se aplica allí donde son gobierno desde hace 25 años: Rosario. El transporte cuesta entre $3.60 y $5, una de las tarifas más altas del país. Otra: la propuesta de Binner de pagar a los docentes un 25% y en cuotas. ¡Igual al kirchnerismo! Un botón de muestra de que Binner y el Frente Progresista no son salida para los trabajadores.