Participaron también Andrés Rodríguez (UPCN), José Lingeri (Obras Sanitarias), Gerardo Martínez (Uocra), Armando Cavalieri (Comercio), Juan Carlos Schmid (Catt), Omar Maturano (La Fraternidad) y Gerónimo Venegas (Uutre), entre otros.
Emitieron un documento en el que reconocen que “las medidas hasta aquí adoptadas (por Macri) siguen atentando contra el poder adquisitivo” y que “la promesa de campaña de que ‘el trabajo no es ganancia’ del presidente Macri ha sido incumplida”. Así y todo, en lugar de movilizarse, estos dirigentes cambiaron para reunirse con diputados de la oposición patronal para pedirles que unifiquen los distintos proyectos para modificar este impuesto. “Lo que se resolvió fue evitar una movilización al Congreso que se interpretara como una presión demasiado fuerte sobre los legisladores y de enfrentamiento con el Gobierno”, explicó uno de los asistentes (Clarín, 29/3).
Otra vez Moyano y sus socios se borraron. Para mostrar que hacen algo, convocaron a un acto en conmemoración del 1o de Mayo para el 29 de abril. El centro sería plantear una posible reunificación de las CGT para el 22 de agosto. ¡Pero hubiera sido muy importante para los trabajadores que están luchando que hubieran fijado alguna medida nacional! ¿Para qué entonces predican una supuesta “unificación” sindical si están dejando pasar los despidos, los bajos salarios y el ajuste?
Después de semejante agachada, la izquierda y los luchadores tienen que redoblar el camino del apoyo a los que luchan convocando a un acto alternativo el próximo 1o de Mayo en Plaza de Mayo y en todo el país.