Escribe Javier Leonforte
Crece la lucha de los trabajadores aeronáuticos de Latam y de otras empresas. Tenemos que rodearlos de solidaridad para que esta pelea se gane.
Dieciséis días de ocupación del hangar de Latam evitaron que la multinacional se lleve a Chile seis aviones que valen 40 millones de dólares cada uno, más los repuestos y las herramientas, que valen otros 10 millones de dólares. La acción directa de los trabajadores frenó el vaciamiento empresarial, mientras el gobierno de Alberto Fernández pretendía dejarlo correr.
Se ha desatado una rebelión, desde abajo, de los trabajadores “autoconvocados” de Latam contra los despidos vía “retiros voluntarios” que la patronal, el gobierno y la conducción de los principales gremios aeronáuticos alientan. Los trabajadores dijeron basta y se concentran masivamente en el Aeroparque. Lo que las conducciones gremiales de la CGT y las CTA no quieren hacer por arriba, los trabajadores lo empezaron a hacer desde abajo. Crecen la unidad, la coordinación y la organización independiente de los aeronáuticos para defender sus puestos de trabajo. Ya son un gran ejemplo de cómo actuar en defensa de los puestos de trabajo y tienen fuerzas para ganar.
El gobierno anunció el cierre de Austral y la fusión de la empresa con Aerolíneas Argentinas buscando atacar conquistas, flexibilizar el convenio, habilitar la tercerización de sectores y, posiblemente, despedir. Por eso el cuerpo de delegados de los técnicos de Austral se opone a la fusión con Aerolíneas y fueron los primeros en ganar la calle.
A esto se sumó la heroica ocupación del hangar de Latam por parte de los mecánicos del gremio Ustara, que en una acción ejemplar frenaron la ofensiva patronal para llevarse los aviones, las herramientas y desguazar la empresa. Los técnicos de Austral y de Latam se unieron en la lucha y ganaron la simpatía de cientos de trabajadores que se autoconvocaron en Aeroparque y están protagonizando una verdadera rebelión, donde se suman compañeros de otras empresas como GPS y Securitas (tercerizadas de seguridad), Serza (tercerizada de limpieza), Avianca (doscientos trabajadores que están sin cobrar en Avian Argentina), Andes, Gate Gourmet (multinacional de catering aéreo) y otras que no pagan sueldos y despiden impunemente. Incluso la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) no pudo reprimir la protesta. Muchos famosos y artistas apoyaron y este sábado realizarán un festival virtual solidario con los trabajadores.
Latam es una empresa pinochetista y bolsonarista que está atacando a los trabajadores argentinos con la complicidad del gobierno de Alberto Fernández y la burocracia sindical de la CGT y las CTA. Desde la izquierda y el sindicalismo combativo tenemos que seguir apoyando su lucha hasta que gane.
Izquierda Socialista está presente desde el primer momento de la pelea, nuestro diputado Juan Carlos Giordano participó de las dos caravanas de Austral y apoyó la ocupación del hangar de Latam. Mariana Scayola y Jorge Adaro llevaron la solidaridad del gremio docente Ademys, que aportó 20.000 pesos. Rubén “Pollo” Sobrero llevó la solidaridad de los ferroviarios y llamó a transformar esta lucha en una bandera de todo el movimiento obrero.
En ese sentido se pronunció el Plenario del Sindicalismo Combativo que planteó “que se abran los libros de Latam para conocer su verdadero estado contable; que se declaren de utilidad pública sus bienes y cuentas en el país para evitar el vaciamiento; que el Estado nacional absorba todas sus rutas y garantice el mantenimiento de todos los puestos de trabajo, incorporándolos al plantel de Aerolíneas Argentinas, o estatizando Latam bajo control de sus trabajadores”.
El martes 11 los trabajadores realizaron una nueva caravana desde Aeroparque hasta la embajada de Chile y luego al Obelisco. Fue de gran impacto ver a las azafatas en la primera línea de la lucha. Y este miércoles 12 participan del Plenario Nacional del Sindicalismo Combativo para multiplicar la solidaridad. ¡Si ganan los aeronáuticos ganamos todos!